Padres de familia de la escuela primaria Leonardo Bravo, donde fueron despedidos 11 maestros por sumarse a las acciones de protesta contra la reforma educativa, impidieron el acceso a los docentes sustitutos enviados por la Administracion Federal de los Servicios Educativos en la Ciudad de México, que encabeza Luis Ignacio Sánchez.

Desde las primeras horas de este miércoles, decenas de padres de familia y profesores disidentes se concentraron para evitar que representantes de las autoridadfes educativas federales dieran paso a los profesores sustitutos, debido a que desde el pasado primero de octubre fueron despedidos los educadores que se sumaron a las protestas convocada por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación.

El pleno de representantes de la sección 9 denunció que la Secretaría de Educación Pública nuevamente intenta desarticular el movimiento magisterial y da una nueva embestida, ahora contra la escuela Leonardo Bravo y su director, Francisco Bravo, quien fue emplazado a recibir nuevas órdenes de adscripción para los maestros. De acuerdo con la nueva Ley General del Servicio Profesional Docente, debe sustituir a los cesados.