La gran apuesta de la reforma laboral recién aprobada por el Congreso es la desaparición de las Juntas de Conciliación y Arbitraje, y el gran riesgo sería el colapso de la justicia laboral, porque no sólo es contradictoria, sino ajena a los interesales reales de los trabajadores, señaló Darlene Rojas Olvera.

Al rendir su cuarto informe de labores, la presidenta de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje afirmó que no podemos ni debemos ser rehenes de intereses de otros países, por aliados que sean, como sucedió con esta reforma, que obedece a los intereses económicos de nuestros vecinos del norte y a los compromisos impuestos por la firma del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica.

La falta de una visión integral del problema en materia de justicia laboral derivará en soluciones parciales y, peor aún, contradictorias con esta reforma de apariencia, enfocada en sustituir las juntas por tribunales adscritos al Poder Judicial, y centralizar en el gobierno federal las atribuciones en materia colectiva para el registro de los sindicatos y los contratos de trabajo.

Ante el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, legisladores y diputados constituyentes, alertó que esa decisión permite la injerencia de la autoridad y del propio patrón en la voluntad de los empleados, que de nuevo quedan como espectadores, cuando se requiere de un nuevo modelo de justicia laboral que incorpore, entre otros aspectos, la oralidad.

Asimismo, se requieren principios procesales sencillos, que las notificaciones electrónicas acerquen la justicia, y que las autoridades cuenten con las atribuciones para hacer cumplir con oportunidad las resoluciones y recursos para no regresar al obedezcáse, pero no se cumpla, señaló Rojas Olvera.

Por ello, pidió a los diputados federales considerar a la impartición de la justicia laboral en la modificación de la norma secundaria que la regulará, y a los constituyentes considerar un modelo de avanzada en el país con la incorporación de tribunales laborales autónomos e imparciales dentro del Poder Judicial local.

A la Asamblea Legislativa le solicitó que en el momento de formular la norma secundaria sea garante en la protección y defensa de los derechos de los actuales trabajadores; y anunció un foro con los titulares de todas las juntas del país para impulsar un nuevo arquetipo de justicia laboral.

Puntualizó que “si no existen más severos desarreglos sociales en la ciudad es por algunas válvulas de escape, como la migración –que se hará más difícil en los próximos años–, la economía informal y el apoyo familiar”.