La condición de que Aeroméxico entregue 24 slots para que el Departamento del Transporte (DOT) de Estados Unidos le autorice la ampliación de su alianza con Delta preocupa al gobierno de México, porque esos horarios de aterrizaje y despegue se entregarán a otras aerolíneas y se afectarán los vuelos nacionales, señaló el secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza.

Sin embargo, dijo, el acuerdo debe ser entre Aeroméxico, las autoridades de Estados Unidos, y la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), que son quienes están en la negociación. Por separado, la presidenta de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), Alejandra Palacios, dijo que hay coincidencia de este órgano regulador con el DOT en cuanto a que la asignación de slots en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) es poco transparente, y las reglamentaciones para ello tienen importantes áreas de mejoras.

Puntualizó que la decisión de que sean 24 slot los que debe entregar Aeroméxico es de la propia autoridad estadunidense, y dijo que en su momento la Cofece señaló que ocho slots eran una cifra adecuada, pero, acotó, las investigaciones de estos dos reguladores se dieron en momentos diferentes.

Ruiz Esparza puntualizó que él no ha enviado documento alguno al DOT en relación con el caso de Aeroméxico y Delta, pero sí lo hizo la DGAC para pedir que se analice con más profundidad el caso, y que considere toda la modernización tecnológica que se ha realizado en el AICM en los pasados tres años, además de haber adoptado la regulación de la IATA para la asignación de slots.

Alejandra Palacios dijo que la decisión sobre la ampliación de la alianza entre Delta y Aeroméxico y la entrega de 24 slots, no es de la SCT ni de la Cofece, sino del DOT. Acotó que los slots en cuestión no están atados a ninguna ruta en particular.