Crece la violencia por disputa entre cárteles, afirman mandos
Miércoles 23 de noviembre de 2016, p. 5
El gobierno federal replanteará el esquema de seguridad que Ejército, Marina y Policía Federal (PF) han aplicado en coordinación con autoridades locales en los municipios guerrerenses de Acapulco, Tixtla, Arcelia, San Miguel Teloloapan y Zitlala, tras el asesinato de 30 personas en esas comunidades el pasado fin de semana.
Los cárteles La familia michoacana, Guerreros unidos, Los Rojos y los Beltrán Leyva disputan las rutas de tráfico y distribución de droga en la zona, señalaron mandos de la PF.
Los esquemas de vigilancia que se han establecido por conducto del Grupo de Coordinación Guerrero se ampliarán a colonias de los municipios donde se han registrado más asesinatos, como es el caso de Tixtla, donde el fin de semana los restos de nueve personas fueron abandonados en bolsas, y también en Acapulco, donde 10 civiles y dos integrantes de la Secretaría de Marina Armada de México fueron asesinados.
Los patrullajes incorporarán el uso de mayores células de inteligencia para detectar y desarticular grupos delictivos o bandas de sicarios y traficantes de drogas que operan en los municipios donde ha repuntado la violencia, ya que, de acuerdo con los funcionarios consultados, la detención de varios líderes de grupos regionales ha generado una ola de violencia por la ocupación de territorios o bien de las rutas por las cuales se mueven drogas sintéticas, goma de opio y mariguana.
Los mandos policiacos consultados señalaron que células de Los Rojos operan desde zonas como Amacuzac, en el estado de Morelos, penetran a Guerrero y luego se retiran. En tanto que en la zona de Chilacahapa, integrantes del cártel Guerreros unidos mantienen su posición, operan desde Iguala hasta Acapulco y controlan zonas de producción de amapola y goma de opio, las cuales han sido disputadas por organizaciones como Los Ardillos y Los Rojos.