León, Gto.

Un grupo de campesinos se manifestó afuera de un acto al que asistió el presidente Enrique Peña Nieto para denunciar que el senador priísta Gerardo Sánchez García defraudó a unas mil personas que aportaron hasta 73 mil pesos cada una con la promesa de obtener viviendas que nunca se construyeron.

Reunidos frente a la sede del Congreso del Comercio Exterior Mexicano, los inconformes exigieron que sean consignados ante un juez los legisladores priístas y que los obliguen a reintegrar el dinero a los afectados, varios de los cuales pidieron prestado en cajas populares o a sus familiares que trabajan en Estados Unidos, comentó.

Los manifestantes dijeron que ya interpusieron 50 denuncias penales ante la Procuraduría General de Justicia del estado contra Sánchez García, también ex dirigente de la Confederación Nacional Campesina (CNC); Rigoberto Paredes Villagómez, coordinador de los diputados locales del PRI y secretario de Recursos Hidráulicos de la confederación, y Luz Elena Govea López, legisladora local e integrante de Acción Femenil de la CNC.

Mediante un altavoz, Ernesto Reyes Valadez, representante del Movimiento de Defraudados, dijo: Le decimos a Enrique Peña Nieto y al gobernador (Miguel Márquez Márquez), que aquí en Guanajuato también hay Duartes y Moreiras, que se les castigue de acuerdo a la ley por el daño que le hicieron a las familias más pobres y a los campesinos.

Hace dos años, Sánchez García, Paredes Villagómez y Govea López promovieron, en nombre de la CNC, el programa Ésta es tu casa, de la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi), recordó.

Al inicio pidieron 3 mil pesos, después 20 mil y al final 73 mil pesos para construir casas en comunidades rurales, pero sólo hicieron tres viviendas en San Francisco del Rincón, comentó Reyes Valadez.

Los defraudados son campesinos de los municipios de Salvatierra, San Francisco del Rincón, San Miguel de Allende, San Luis de la Paz, Dolores Hidalgo y de Romita, enumeró.

Las denuncias no han procedido. Exigimos al gobernador que este problema no sea moneda de cambio. Creíamos que estos robos eran del siglo pasado, pero son práctica cotidiana de esta clase tan nefasta que es la política, dijo Reyes Valadez.

Hay quien dio hasta para tres casas y hoy están desilusionados. Ni casa ni dinero y deudas de las que hay que pagar intereses, lamentó el activista, quien fue atendido por personal del gobierno estado y luego por un representante federal.