Ante el reforzamiento del Estado mexicano a los controles en sus fronteras norte y sur, los traficantes ofrecen ahora rutas alternativas a los migrantes centroamericanos y nacionales para llegar a Estados Unidos por vía marítima, que es la de mayor peligro, alertó Felipe de la Torre, oficial de gestión de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc).

Durante una reunión en el Senado, en la que presentó la campaña Tráfico ilícito de migrantes: negocio mortal, De la Torre pidió que se difunda en las estaciones de radio de habla indígena, porque “el principal mensaje que queremos transmitir a las sociedades de México y el resto de América Latina es que el tráfico ilícito de migrantes genera billones de dólares para la delincuencia organizada.

Estamos hablando no sólo de las escenas terribles que ustedes han visto en el Mediterráneo, de todos estos seres humanos desafortunados que tienen que entregarse en las manos de un traficante para cruzar el mar, y muchos de ellos se ahogan, se pierden y ni siquiera tenemos estadísticas de cuántos han perdido la vida en el océano, refirió.

Pero esta situación, destacó el especialista de la Onudc, no es ajena a nuestra región. Evidentemente, el tráfico ilícito de migrantes por tierra es la modalidad más común en esta zona, la más conocida, pero a medida que el Estado mexicano pone más controles a las rutas terrestres, los traficantes ofrecen otras rutas alternativas para llegar a Estados Unidos.

Y con tanto cinismo, abundó De la Torre, que muchas veces hacen creer a los migrantes que han arribado a costas estadunidenses, cuando están en una costa mexicana, como Oaxaca.

Con ello, insistió, lo que quiero ilustrar es que estamos enfrentados a un negocio que genera muchos recursos para la delincuencia organizada, pero que también atenta seriamente contra los derechos humanos de los migrantes.

Ante las presidentas de las comisiones contra la Trata de Personas, la panista Adriana Dávila, y la de Asuntos Migratorios, la petista Layda Sansores, así como las senadores Mariana Gómez del Campo (PAN) y Sylvia Martínez Elizondo (PRI), De la Torre dijo que la campaña Tráfico ilícito de migrantes: negocio mortal busca dos objetivos: alertarlos de los riesgos que enfrentan al contratar los servicios de un traficante para cruzar de manera irregular por tierra, mar o aire, y sensibilizar a las autoridades para que puedan distinguir las diferencias entre trata de personas y tráfico ilícito de migrantes, para que puedan estar profesionalizados para investigar de mejor forma el delito de tráfico”.

Antes de mostrar a las senadores el kit de la campaña, consistente en tres mensajes en los que se ilustran los peligros del tráfico ilícito de migrantes por vía terrestre, donde muchas veces los dejan abandonados en el desierto, en contenedores o tráileres cerrados sin agua, o bien al caminar de noche los pueden picar los alacranes o víboras.

Sobre el tráfico vía marítima, que es la ruta más mortal, en realidad las cifras no son del todo conocidas y en México los traficantes ofrecen esas vías como alternativa a los migrantes centroamericanos y mexicanos.

Y la tercera es la ruta aérea, la menos peligrosa, pero implica que al migrante le otorgan un pasaporte falso, una visa adulterada, documentos apócrifos, y al llegar al destino deseado le van a negar la entrada por llevar documentos ilegales.