El documento será fortalecido con datos biométricos; pedirán datos al INE
Miércoles 14 de diciembre de 2016, p. 39
La Clave Única de Registro de Población (CURP) es, de nueva cuenta, la base para el pretendido nuevo mecanismo de identidad de los habitantes.
Esa clave fue creada en 1996. Veinte años después vuelve a ser sustento para la expedición de una credencial con datos personales, pero ahora fortalecida con datos biométricos.
Este año la Secretaría de Gobernación (SG) documentó 474 millones de consultas a la base CURP, administrada por el Registro Nacional de Población e Identificación Personal (Renapo), lo cual equivale a 1.3 millones de revisiones por día.
Esa cifra evidencia uno de los mayores movimientos ordinarios en las listas de datos personales similares, como la del Registro Federal de Electores, operada por el Instituto Nacional Electoral (INE); la cancillería, el Instituto Mexicano del Seguro Social y el Servicio de Administración Tributaria.
Pese a la persistencia en la operación de la CURP, esta herramienta es sólo el inicio para generar una clave debidamente cotejada con la información asentada en actas de nacimiento. Adicionalmente, robustecerla con los principales datos biométricos (rostro y 10 huellas digitales) de los habitantes.
En noviembre de 2014 el presidente Enrique Peña Nieto presentó un decálogo en materia de seguridad y justicia, en el cual ponderó sobre el tema de la emisión de una clave de identidad.
Atrás quedó, como objetivo, la creación de la CURP, materia prima del Registro Nacional de Población –ciudadanos, menores de edad, mexicanos residentes en el exterior y extranjeros residentes en la República Mexicana–, como estipula la Ley General de Población.
También en el pasado está el proyecto del sexenio anterior para emitir cédulas de identidad. Con una inversión millonaria y múltiples obstáculos jurídicos, el plan se limitó, como primera etapa, a la emisión de poco más de 25 millones de credenciales para menores de entre cuatro y 17 años de edad. Al final se entregaron menos de 10 por ciento de las programadas.
Ahora la opción es convencer al INE de realizar un trabajo conjunto y de intercambio de información para apoyar esa gran base de datos con información de las actas de nacimiento, la CURP y los datos biométricos del Registro Federal de Electores, entre otras.
Jorge Rojo, director del Renapo, dijo que a partir de enero continuará el diálogo con diversas instancias (el INE y la asociación de banqueros, por ejemplo) para tener el año que entra una base muy importante
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El objetivo es emitir más de 120 millones de claves de identidad para mexicanos, con datos de los registros civiles cotejados, la CURP y los elementos biométricos mencionados.