Comportamiento diferenciado en zonas rurales y urbanas
Viernes 24 de febrero de 2017, p. 37
El poder adquisitivo del ingreso laboral se redujo uno por ciento entre el tercero y el cuarto trimestre de 2016, informó el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), con base en el Índice de Tendencia Laboral de la Pobreza. Pero comparado el cuatro trimestre de 2015 con el mismo periodo de 2016, el poder adquisitivo del ingreso laboral aumentó 3 por ciento
Esto indica que creció el porcentaje de personas pudieron adquirir la canasta alimentaria con el ingreso laboral en su hogar entre 2015 y 2016. En ese periodo el ritmo de recuperación anual del poder adquisitivo observó un comportamiento diferenciado en las zonas rurales y urbanas. Destacó que el incremento de la inflación a partir de octubre de 2016, especialmente notorio en enero pasado, podría revertir lo ganado en el poder adquisitivo del trabajo en los pasados dos años.
En el ámbito urbano el ingreso laboral promedio creció 3.3 por ciento entre 2015 y 2016, pero en el ámbito rural el poder adquisitivo de los ingresos se desaceleró al pasar de un aumento de 4.3 por ciento a 3.7 por ciento en 2015 y 2016.
El índice no constituye una medición de pobreza, toda vez que no integra todas las fuentes de ingreso ni todas las dimensiones de la medición oficial de la carencia, pero sirve como señal preventiva a corto plazo sobre la situación del ingreso laboral de las familias en relación con el costo de la canasta alimentaria.
Si el ingreso laboral aumenta más que el valor de la canasta alimentaria, el poder adquisitivo del hogar mejora y el índice tiende a bajar.