Pachuca, Hgo.

La Auditoría Superior del Estado de Hidalgo (ASEH) detectó en la cuenta pública 2015, correspondiente a la gestión del ex gobernador priísta Francisco Olvera Ruiz (2011-2016), observaciones e irregularidades por 500 millones de pesos, de los cuales cerca de 200 fueron localizados en la construcción, equipamiento y mejoramiento de hospitales, clínicas y centros de salud en la entidad.

En otras, el órgano de fiscalización encontró inconsistencias por 141.2 millones de pesos en la edificación y equipamiento del hospital general de Tulancingo y en la construcción del centro de salud Doctor Jesús del Rosal, de Pachuca.

De acuerdo con los expedientes 2014/CONCEC-00783 y 2014/CONCEC-00784, correspondientes a las mencionadas obras en Pachuca y Tulancingo, no se encontraron los registros de recepción y aplicación de 141.2 millones de pesos en los reportes presupuestales de ambas instituciones, por lo cual se incumplió con los artículos 34 y 36 de la Ley General de Contabilidad Gubernamental.

Detalló que la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH) no entregó información a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público sobre los montos e inversión de recursos públicos en la construcción del hospital general de Tulancingo en los dos primeros trimestres de 2015. Asimismo, se detectaron errores en el avance físico financiero del cuarto trimestre, al igual que anomalías en el costo del equipamiento de 90 camas.

Inconsistencias sin subsanar

Según la ASEH, aún persisten las irregularidades que intentó subsanar la dependencia local: La entidad fiscalizada (SSH) presentó a la Auditoría Superior información y documentación para atender la observación formulada. Sin embargo, los documentos y argumentos presentados no contenían los elementos suficientes para justificar la observación.

Esperanza Guerrero Hernández, directora general de la ASEH, explicó que las observaciones derivan de que la SSH no entregó los registros ni las bitácoras de entrada y salida de los insumos ni los de compra de materiales de construcción para ambos inmuebles.

Tampoco se entregaron los correspondientes al equipamiento y camas adquiridos, ni los controles de almacén donde deben aparecer las fechas de entrada y salida de los insumos.

Asimismo, la ASEH descubrió que no se concretó la edificación de un banco de sangre para la ciudad de Pachuca, aunque para ello se facturaron 142 mil pesos; la inexistente obra se registró con la clave DGPLADES-CERT-CALIDAD-HGO-01/13.

La construcción, equipamiento y mejoramiento de hospitales fueron parte de las promesas de campaña de Olvera Ruiz. Paradójicamente, la Auditoría encontró que 40 por ciento de las irregularidades fueron en diversas obras para nosocomios y centros de salud.

En el hospital general de Zimapán –aún inconcluso a pesar de que su operación se proyectó para 2016– se detectó que 14 mil de los 916 mil 364 pesos autorizados para una parte del edificio fueron usados en obras no justificadas.

En la página 187 del informe se señala que se asignaron 13 millones 679 mil pesos, provenientes del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas (FAFEF), al equipamiento del centro de salud del municipio de Eloxochitlán, ubicado en la sierra hidalguense, pero sólo se ejercieron 949 mil 515.44 pesos. A esta obra se le asignó la clave 2015/FAFEF-00241. Con tal irregularidad, indica el reporte, se incumplió lo establecido en los artículos 5, párrafo segundo; 18, y 19, párrafo primero, del decreto que autoriza en todas y cada una de sus partes el Presupuesto de Egresos del estado de Hidalgo para el ejercicio fiscal del año 2015.

Otra obra con irregularidades –señaló el órgano fiscalizador– es la 2015/FAFEF-00498, correspondiente a la construcción de un acceso al Hospital Regional del Altiplano, en el municipio de Apan. Se aportaron 4 mil 453 pesos a cuenta del FAFEF, pero las obras no se ejecutaron.

Al iniciar su gobierno, Olvera Ruiz aseguró que en su gestión la salud sería una prioridad y que le destinaría recursos millonarios; dos meses antes de concluir su mandato, presumió que en su sexenio se invirtieron mil millones de pesos en la construcción y equipamiento de nosocomios, y más de 530 millones de pesos en las clínicas de la entidad.

Se concedieron a la SSH 30 días hábiles para entregar los documentos probatorios. Toca al actual gobernador, el también priísta Omar Fayad Meneses, subsanar las observaciones por casi 200 millones de pesos en materia de salud.