Con el lema Resonancia en acción, más de 40 mujeres de varias generaciones, la menor de 14 años, leyeron poemas, cuentos, crónicas y fragmentos de ensayos y dramaturgia de su autoría en el 21 Encuentro Internacional de Mujeres en el Arte y el 17 Encuentro Iberoamericano de Mujeres en el Arte.

La lectura se desarrolló el pasado miércoles en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes.

Muchos temas que atañen a la mujer, en múltiples ámbitos y circunstancias, se reflejaron en los textos literarios de las autoras: conmovedores y amorosos unos, brutales otros, pero todos como una muestra de la literatura femenina en resistencia.

Desde la violencia y abusos de que son objeto de niñas o adultas, los feminicidios, los secuestros con fines de explotación sexual, la desigualdad y la violación de sus derechos hasta la infertilidad, la identidad de ser mujer, el amor a un hombre, la madre o las hijas, incluyendo escritos sobre el aislamiento o la agresión entre ellas mismas.

La mujer está todo el tiempo en resistencia, dijo Marisol Gutiérrez, responsable del área de literatura de ComuArte. “Actualmente nos preocupa que existe cierto retroceso en lo que son las relaciones familiares; hay mucha violencia intrafamiliar. El lema Resonancia en acción tiene que ver con todo aquello con lo que la mujer se vincula, con su accionar constante y permanente. Muchas veces tenemos que jalar al hombre, quien debe estar presente con nosotras en ese accionar y poner un alto a la violencia de distintos tipos contra la mujer”.

Denuncian regresiones

Para la compositora Leticia Armijo, quien encabeza el Colectivo de Mujeres en la Música y es directora de ComuArte/Internacional, la idea es hacer resonar la resistencia ante ciertos fenómenos de regresión a escalas nacional e internacional, impuestas por las políticas patriarcales, discriminatorias y xenofóbicas.

Con esa lectura tratan de visibilizar y escuchar la palabra de mujeres que enfrentan día a día la violencia ejercida contra ellas, los abusos de la sociedad neoliberal, los derechos ganados en una lucha desigual. En su voz se plasma la acción de las mujeres por dignificar su entorno, así como su libertad de vivir, pensar, vestir y decidir en todo lo que les concierne, como un derecho a la vida libre de violencia, explicó Armijo.

Los feminicidios van en aumento, las periodistas sufren de acoso institucional, son cuestiones irresueltas hasta hoy. No hay justicia. Como creadoras y luchadoras sociales trabajamos muy al margen y cada vez con menos recursos. Las instituciones culturales nos han quitado el apoyo y espacios para desarrollar nuestro trabajo, expresó la compositora.

Un ejemplo es que se excluye la obra de las compositoras mexicanas en los programas regulares de las orquestas y grupos artísticos del país.

Dichas orquestas incluyen en sus programas sólo 6 por ciento de autores nacionales; el resto son compositores extranjeros. Y de ese mínimo porcentaje, el de obras de mujeres es aún menor. En México no se tocan obras de compositoras nacionales.

Entre las actividades del 21 Encuentro Internacional de Mujeres en el Arte se efectuará el Seminario Internacional de Estudios de Género en la Facultad de Música de la Universidad Nacional Autónoma de México; se entregará el Premio Coatlicue a la luchadora social Olga Talamantes y a la escritora Silvia Molina, y el Premio Internacional de Derechos Humanos Tlaltecutli a la dibujante y caricaturista Cintia Bolio.