Plantea recortes significativos a protección ambiental y programas de ayuda al exterior
Sin seguridad no puede haber prosperidad
, argumenta el presidente en su propuesta
Viernes 17 de marzo de 2017, p. 26
Washington.
El presidente Donald Trump presentó este jueves al Congreso un proyecto de presupuesto del gobierno federal de 1.15 billones de dólares, reforma de gran alcance que reduce el gasto de muchos programas nacionales a fin de financiar un aumento significativo en las fuerzas armadas y hacer un primer pago sustancial para la construcción de un muro fronterizo entre Estados Unidos y México, para el cual destinó 2 mil 600 millones de dólares para planificación y diseño.
La propuesta de Trump, que debe ser aprobada por el Congreso, busca fuertes recortes a la Agencia de Protección Ambiental (EPA por sus siglas en inglés) y a otros programas nacionales.
Un presupuesto que pone a Estados Unidos en primer lugar debe hacer de la seguridad de nuestro pueblo su prioridad número uno, porque sin seguridad no puede haber prosperidad
, dijo Trump en un mensaje que acompaña su plan de presupuesto.
El proyecto incluye un aumento de 54 mil millones de dólares para las fuerzas armadas, el más grande desde el gobierno de Ronald Reagan, en la década de los 80. Promete la entrega inmediata de dinero para la preparación de tropas, la lucha contra milicianos islámicos y la adquisición de nuevos buques, aviones de combate y otras armas.
El aumento de 10 por ciento para el Pentágono se financia con 54 mil millones de dólares en recortes a la ayuda externa y agencias nacionales que fueron protegidas por Barack Obama cuando fue presidente.
Se espera que el proyecto de presupuesto cause choques entre republicanos y demócratas en el Congreso, que tendrán la última palabra respecto al gasto.
Trump se ha comprometido a tener un plan de gasto que le permita cumplir sus promesas de campaña de impulsar la seguridad nacional a través de un mayor gasto en defensa y de la construcción de un muro a lo largo de la frontera con México. Si bien ha asegurado repetidamente que México pagará por el muro, los contribuyentes estadunidenses cubrirán los gastos del proyecto.
Estados Unidos gasta más de medio billón de dólares en defensa, más de lo que gastan juntos los siete países que le siguen, pero Trump ha señalado que el Pentágono sería el más beneficiado, con un impulso de 54 mil millones de dólares de gasto en defensa.
Es poco probable que los demócratas respalden los recortes, y las deserciones en las filas republicanas aumentan la posibilidad de un enfrentamiento en el Congreso y un potencial cese de actividades de la administración cuando se inicie el año presupuestal de 2018, el 1º de octubre.
Era improbable que el presupuesto, que se esperaba apretado
, ofreciera muchos de los detalles que esperaba el Capitolio. Se limitará a la parte discrecional de poco más de un billón de dólares del presupuesto federal anual de 4 billones federal que paga por las agencias y departamentos del gabinete.
Por lo pronto, legisladores demócratas expresaron preocupación por el impacto de los recortes para América Latina y el propio Estados Unidos. Eliot Engel, principal demócrata en el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, advirtió que disminuir la cooperación internacional en 28 por ciento (10 mil millones de dólares) deterioraría las relaciones con aliados en la región, debilitando la influencia de Washington.
Desde 2007 Estados Unidos ha destinado 2 mil 300 millones de dólares en tareas antidrogas en México por medio de la Iniciativa Mérida. El presidente del subcomité para el hemisferio occidental, Albio Sires, indicó que los recortes pondrían en riesgo programas sociales para beneficiar a la juventud en América Central, por lo cual sería factible un nuevo incremento de menores centroamericanos en la frontera estadunidense sin documentos ni acompañantes adultos, como ocurrió en 2014.
El gobierno del presidente Barack Obama logró la aprobación del Congreso para destinar 750 millones de dólares durante el año fiscal 2016 a Guatemala, Honduras y El Salvador.
En otro frente para Trump, el juez federal Theodore Chuang, de Greembelt, Maryland, se sumó a la postura de su colega de Hawai, Derrick Watson, y frenó la puesta en marcha del segundo decreto que buscaba impedir el ingreso al país de ciudadanos de seis países de mayoría musulmana.
Los dos miembros de mayor rango en el Comité de Inteligencia del Senado, el republicano Richard Burr y el demócrata Mark Warner, afirmaron que no hay indicios de que la Torre Trump sea objeto de espionaje
del gobierno federal antes o después de las elecciones presidenciales de 2016, como acusó Trump.