Democracia de tinaco
Altruismo
electoral
PRI: botín mexiquense
ara nadie es un secreto que México destaca por ser un país con enormes carencias y creciente desigualdad, que ningún gobierno –del color que sea– ha resuelto. Por el contrario, la situación empeora según avanza el calendario y el número de inquilinos de Los Pinos y de gobernadores.
Unos y otros presumen multimillonarios presupuestos para el combate
de la pobreza (en realidad se trata de un programa muy bien afinado para comprar votos con recursos del erario), pero en los hechos ésta crece a paso veloz, al igual que las fortunas de los supuestos gobernantes y su cauda sexenal de familiares, amigos, compadres y conexos.
Si se trata de dinero ajeno los políticos parecen imán, son depredadores natos, aunque también muy creativos en sus intentos por justificar el atraco. Pero, sin demérito de otras empresas disfrazadas de partidos, en estas artes los más avezados son los priístas, aunque la competencia es feroz y creciente, pues probadas las mieles del poder todos están prestos para succionar las arcas nacionales.
Pero bueno, parece que los tricolores encontraron la fórmula perfecta para atender y resolver las carencias y necesidades de millones de mexicanos, a cambio de la credencial de elector y, obvio es, el voto respectivo. Lo único que falta es que promuevan un decreto para que a partir de ya el estado de México sea declarado como una entidad en permanente proceso electoral, con el objetivo de que todos los días del año, de todos los años, sean de campaña para gobernador de la entidad.
Desde luego que tales prácticas se registran en todos y cada uno de los procesos electorales de la República, sean éstos federales, estatales o municipales, pero se dan casos extremadamente boyantes como el citado, donde los mexiquenses con credencial de elector tienen la posibilidad de recibir, a cambio de su voto, alguna dádiva de quienes los saquearon en el sexenio que está por concluir, es decir, el de Eruviel Ávila, y de los sucesores que harán lo propio.
Allí está la solución del México desigual y con crecientes carencias sociales, porque ahora que se acerca la sucesión en el estado más poblado y con mayor número de votos potenciales en esta República de discursos, los tricolores regalan todo: desde tinacos hasta tarjetas precargadas con un dinerito para los necesitados (aunque a la hora de la hora muchas aparecen en ceros); de estufas a despensas, con y sin gorgojo; de escrituras de propiedad a casas color rosa; de computadoras portátiles a memorias USB; de útiles y becas escolares a recursos para el campo, y, en fin, de herramientas a pintura, todo ello, desde luego, con cargo al erario estatal y federal, y con un enorme margen de robo para los políticos altruistas
.
Por si fuera poco, en un abrir y cerrar de ojos el gobierno federal y el estatal han metido el acelerador a los denominados programas sociales
para repartir hasta lo que no hay. ¿Por qué? Bueno, dice la cínica Rosario Robles (secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, y ex titular de la Secretaría de Desarrollo Social) que en el estado de México han echado toda la carne al asador por la simple razón de que tenemos un Presidente mexiquense
.
Así de simple y convincente. Y como dicen que es altruismo, a los políticos les vale un cacahuate hacer el chanchullo electoral a la vista de todos… aunque sea ilegal. Para dejarlo en claro, un ejército de funcionarios de alto nivel
(así les llaman) federales, estatales y municipales trabaja activamente en el estado de México para darle duro a la compra de votos, disfrazada de apoyos sociales
, con el fin de intentar inflar a un candidato dinástico totalmente apagado y, desde luego, no perder el botín mexiquense.
Para no ir más lejos, ayer el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, con Eruviel a su lado, se apersonó en Ecatepec para la entrega simbólica de recursos a unos 150 adultos mayores, de un universo de 350 mil en esta entidad y que en alguna parte de su vida trabajaron formalmente y acumularon recursos en el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR)
(La Jornada, Israel Rodríguez).
El titular de Hacienda dijo que “a estos adultos hay que irlos a buscar y llevarlos de la mano para que recuperen ese guardadito que les permitirá en este año de incertidumbre y de retos importantes ayudarse para poner un negocio, ayudar a sus nietos o enfrentar cualquier otro imprevisto. Ese guardadito es de ustedes y así como tuvimos que ir a buscar a los estudiantes para que se afiliaran al IMSS y buscar a las guarderías para que dieran preprimaria e ir a buscar al adulto mayor para afiliarlo al Seguro Popular, ahora hay que ir a buscar a todos los adultos mayores que en el estado de México trabajaron sin alcanzar una pensión y tienen un guardadito que les podemos entregar” (ídem, con sintaxis original).
Qué generosidad de su parte, qué altruismo, porque Meade, que siempre anda con prisas y nunca tiene espacio para la pelusa, ayer se dio tiempo para entregar personalmente el guardadito a 150 adultos mayores que sobreviven en Ecatepec, es decir, se tomó la molestia de atender en directo a 0.04 por ciento de la población objetivo
(350 mil en total) que acumuló recursos en el SAR y habitan en el estado de México, y lo hizo justo cuando el ambiente electoral en la entidad está al rojo vivo. Los beneficiarios de otros estados de la República pueden esperar… hasta su respectivo proceso electoral.
Por cierto, los depredadores panistas también hacen su luchita y son diestros en las mismas artes, pero lamentablemente su candidata al estado de México, Josefina Vázquez Mota, está más que entretenida tratando de tapar el cochinero de Juntos Podemos (con recursos públicos cortesía del gobierno peñanietista) y el dejado por los negocios familiares recién descubiertos. No pasará mucho tiempo sin que la susodicha y sus muchachos metan a fondo el acelerador con el mismo fin de los altruistas tricolores.
¿Y la autoridad
electoral? Como siempre, finge demencia y juega a lanzar la papa caliente. No me toca; le toca al pendejo que la cache
.
Las rebanadas del pastel
Ignominiosa y salvaje, por decir lo menos, la resolución del juez
tercero de distrito de Veracruz, Anuar González Hemadi, de amparar a Diego Cruz, integrante de Los Porkys, acusado de pederastia y abuso sexual contra la menor Daphne Fernández. Este fulano es una vergüenza para el de por sí desprestigiado aparato de procuración de justicia
y un insulto, otro, para los mexicanos.
Twitter: @cafevega