Lunes 3 de abril de 2017, p. 8
En la misa dominical encabezada por el cardenal Norberto Rivera Carrera se oró por todos los obispos y sacerdotes que sufren el odio, la persecución o la tiranía de quienes no toleran el anuncio del Evangelio para que el Señor los llame a una nueva situación y libre de esa amenaza que les impide predicar el reino de Dios en nuestro país
.
En el semanario Desde la fe se abordaron justamente estos temas. Se expuso el caso del obispo de Cuernavaca, Ramón Castro Castro, quien ha sido objeto de las calumnias, ataques y difamaciones
del gobernador de Morelos, Graco Ramírez.
En el mismo semanario se recordó el asesinato del presbítero Felipe Altamirano Carrillo, sacerdote de la etnia cora perteneciente a la prelatura del Nayar. El crimen fue cometido la semana pasada.
De acuerdo con el sacerdote Omar Sotelo, director del Centro Católico Multimedial, el cual realiza análisis anuales sobre las agresiones a religiosos, el homicidio de Altamirano Carrillo es el segundo crimen que se comete este año en contra de un sacerdote.