La administradora de fondos para el retiro (Afore) XXI Banorte se convirtió en la cuarta de mayor tamaño de Latinoamérica, al manejar activos por 658 mil millones de pesos de ahorro de los trabajadores, cantidad que equivale a 4 por ciento del valor de la economía nacional, manifestó ayer Juan Manuel Valle, nuevo director de la institución, en conferencia de prensa.

Con ese monto bajo su administración, la Afore de Banorte maneja una cuarta parte del ahorro para el retiro de los trabajadores mexicanos, cuyo monto conjunto es equivalente a 16 por ciento del producto interno bruto (PIB), aseguró el directivo.

La Afore XXI Banorte es, por la magnitud de los recursos que maneja –que corresponden a 11 millones de trabajadores–, el administrador de fondos para el retiro número 96 del mundo y el cuarto en el continente americano, pero por la dinámica de población de México vamos a superar pronto a las dos chilenas que están arriba, añadió.

El volumen de recursos del sistema de pensiones en México, comentó, ha permitido el desarrollo de otros instrumentos financieros que ahora mismo son fuente importante de recursos para proyectos inmobiliarios o de infraestructura, dado que los fondos de las Afore están invertidos en horizonte de largo plazo.

Después de un año como 2016, en el que la inestabilidad financiera provocó minusvalías en el ahorro de los trabajadores –que el valor de los recursos disminuyó por la caída en el precio de los instrumentos en que están invertidos–, los rendimientos en lo que va del año han sido buenos. Vamos arriba (de 2016) y eso impacta en el ahorro de los trabajadores, mencionó. Desde esa perspectiva vamos bien, apuntó.

En el último cuatrimestre hubo minusvalías. Ese periodo fue malo, porque cuando se empiezan a ajustar las tasas al alza tenemos que revaluar nuestros títulos.

Recepción de remesas

Una vez que la regulación ha sido adaptada, la Afore XXI Banorte está preparada para recibir remesas de los mexicanos que radican en Estados Unidos y que pueden ver en esta forma de ahorro una inversión con rendimientos superiores a los que ofrece cualquier instrumento financiero en el país.

Hasta ahora, explicó, la limitante es que el migrante en Estados Unidos no puede abrir de manera remota una cuenta individual de Afore. Por ello, la alternativa para enviar remesas es hacerlo a una cuenta de otra persona o a una propia, en caso de que la haya tenido antes de emigrar a aquel país.