Ocupa la sala Cristina Payán del Museo Nacional de Culturas Populares
el gran portento de la agroecología que es la milpa
Es decirle al señor que quiere poner murallas que el Día de Acción de Gracias es a los pueblos originarios a los que dan gracias por la milpa mexicana, explica Diego Prieto, titular del INAH
Viernes 7 de abril de 2017, p. 5
La milpa como sistema de agricultura ancestral, su importancia para México y los pueblos originarios no sólo del país, sino de todos los lugares en el mundo donde sigue cultivándose, su desarrollo y el peligro que implica sembrar maíz transgénico son algunos temas explorados en una exposición.
Milpa: pueblos del maíz es la muestra que la noche del miércoles se inauguró en el Museo Nacional de Culturas Populares.
Es decirle al señor que quiere poner murallas que el Día de Acción de Gracias es a los pueblos originarios a los que dan gracias, y que lo que comen ese día es producto de la milpa mexicana, que recupere esta vieja historia y nuestra historia milenaria más profunda. El Día de Acción de Gracias nos dan las gracias
, afirmó el titular del Instituto Nacional de Antropología e Historia, Diego Prieto, durante una breve ceremonia, antes del recorrido, en la que participaron Enrique Ortiz Lanz, coordinador nacional de Museos y Exposiciones; Jacinto Chacha, director general de Culturas Populares Indígenas y Urbanas, y el director del Museo Nacional de Culturas Populares, Rodolfo Rodríguez Castañeda.
La exposición, que ya se presentó en Querétaro y se prevé que recorra varios puntos del país, tiene la finalidad de ponderar la importancia del maíz y este portento de la agroecología que es la milpa
, cuya característica es que es adaptable, diversa, y no sólo es el maíz, sino lo que acompaña su siembra: frijol, calabaza, chile, verdolaga, quintoniles y magueyes, añadió Prieto.
La milpa, dijo, se extendió hasta Canadá y el componente fundamental de ella –el maíz, fue y es el sustento de los pueblos mexicanos, los que formaron Mesoamérica y ha acompañado la historia de México hasta nuestros días.
El funcionario recordó que hace tiempo se presentó en el mismo museo la exposición Sin maíz no hay país, que se convirtió en lema de la lucha por la defensa de este grano.
Milpa: pueblos de maíz es para llamar la atención de que el maíz no va solo, va con otros alimentos
, además de que remite al gran portento agrícola que es la milpa y que recordar que los pueblos y culturas mesoamericanas están hechas de maíz y seguimos estando hechos de maíz
, dijo Diego Prieto.
Corazón de Mesoamérica
La milpa es una unidad productiva, base económica y de desarrollo, y parte de la cosmovisión de los pueblos meoamericanos. Es el corazón de esta Mesoamérica y al celebrarla nos daremos cuenta de que somos hombres del maíz
, explicó Jacinto Chacha, director general de Culturas Populares Indígenas y Urbanas.
La exposición, cuya curaduría estuvo a cargo de Luis Felipe Crespo, reúne piezas prehispánicas y contemporáneas que hacen referencia al maíz, un apartado que presenta algunas de las variedades que se cultivan, carteles realizados por el artista Francisco Toledo en defensa del maíz, una explicación de lo que es el maíz transgénico, bordados que representan la estrecha relación de los pueblos con ese grano y la milpa, y la obra Mazorcas, más de cien mil granos contra los transgénicos, de Javier del Cueto, con 500 módulos de cerámica de alta y baja temperatura que representan igual número de mazorcas.
Los granos de cada mazorca, 200 en promedio, se elaboraron a mano. Cada mazorca representa las distintas razas de maíz mexicano.
La muestra concluiráa el 18 de junio la sala Cristina Payán del museo localizado en Hidalgo 289, Del Carmen, Coyoacán.