La sociedad mexicana, expresó Bernardo Bátiz, vive en un hipercapitalismo que es resultado de la libre competencia, la cual es necesaria, lo que yo critico es que si ponemos como valor máximo de la sociedad la competencia, siempre habrá perdedores y ganadores. Agregó que en México los ganadores son hoy los oligopolios que impiden el desarrollo y la justicia.

Bátiz presentó su libro Humanismo cristiano y capitalismo en la Universidad Iberoamericana (Uia). Explicó que se trata de un texto con el que “quise dar un testimonio y decir algo que provoque.

“Hoy –declaró el jurista y representante de Morena en la Asamblea Constituyente de Ciudad de México– ya estamos bajo el gobierno de los triunfadores, de los que aplastaron a todos los demás, de los que miden su victoria en pesos y centavos. En México lo que nos están diciendo es que la competencia es el valor máximo: se hacen leyes para que México sea competitivo. Eso no lo acepto. Mejor que sea cooperativo, solidario.”

El texto de Bátiz, licenciado en derecho por la UNAM y maestro en la Uia, fue comentado por José Agustín Ortiz Pinchetti y los catedráticos Raúl González Schmal y José de Jesús Legorreta, quienes plantearon que se trata de un libro que busca provocar la discusión y que plantea una vía para el avance del país.

González Schmal, profesor emérito de la Uia, indicó que se trata de un libro que al mismo tiempo es una autobiografía y un conjunto de reflexiones sobre autores y obras que han guiado la vida del autor, todo hecho bajo una línea conductora, su profunda fe cristiana.

José de Jesús Legorreta Zepeda, profesor investigador del departamento de Ciencias Religiosas de la Uia, apuntó que el título del libro editado por Porrúa pareciera plantear la comparación de peras con manzanas: el cristianismo, una religión; con el capitalismo, un sistema económico. Pero, agregó, en el texto se plantea que el capitalismo genera fieles y se comporta como una religión. Se puede discutir el asunto, pero es interesante. El libro es una contribución que nos invita a discutir y a debatir.

Para José Agustín Ortiz Pinchetti, un valor agregado del libro es que aparece en una situación extrema que vivimos en México, cuando sentimos que todo parece precipitarse. E invita a una reflexión: ¿Qué podemos hacer los cristianos en esta coyuntura de la vida del país? Tenemos que transformar este país con honestidad y con justicia, y aquí es donde brilla el espíritu cristiano.