Ante la amenaza de concesionarios de diversas rutas de transporte público colectivo de realizar un paro del servicio de no autorizarles un aumento a las tarifas a la brevedad, la Secretaría de Movilidad (Semovi) los llamó a no incurrir en acciones que afecten considerablemente a los usuarios.

Los acuerdos que se han alcanzado en las mesas de trabajo con los transportistas se darán a conocer próximamente, dijo, y reiteró su disposición al diálogo y a buscar hasta el último momento medidas que aminoren el costo de los gastos de operación e impacten lo menos posible en la economía de la gente.

Concesionarios y operadores de las rutas 110, 36, 47, 24, 59, 112, 4 y 95 realizaron una protesta en la calle Álvaro Obregón, mientras que a integrantes de la organización Transportistas Unidos de la Ciudad de México por una Tarifa Justa y Digna les cancelaban una reunión con el titular de la Semovi, Héctor Serrano.

Nuevamente nos cambiaron el encuentro con el secretario para el jueves a las 11 horas. De no tener una respuesta afirmativa a nuestra demanda de incrementar la tarifa a tres pesos, nos movilizaremos el martes 18, de la Semovi al Zócalo, adelantó Nicolás Vázquez, vocero del frente de transportistas.

Se trata, dijo, de lograr un acuerdo que ayude a continuar con la prestación del servicio, pues el alza en los combustibles e insumos ha provocado que alrededor de mil 500 unidades de transporte, principalmente en las zonas poniente, oriente y centro, hayan dejado de operar.

Los dueños no tienen recursos para hacer frente a los costos de operación, lo cual provocó la semana pasada que los 13 camiones de la empresa Corredor Oriente Poniente, que prestaban servicio en la línea 2 del Metrobús, dejaran de hacerlo.

Por ello es necesario un aumento también al pago por kilómetro que recibimos para adquirir el combustible, dar mantenimiento a las unidades, pagar a trabajadores y socios, y cubrir las letras de las unidades, o que las autoridades nos otorguen un subsidio, como sucede con el Sistema M1, señaló.

Hoy, destacó, los concesionarios que forman parte de las 52 organizaciones de la asociación, con un parque de más de 10 mil unidades –una tercera parte del total–, estamos sobreviviendo y requerimos el apoyo del gobierno para seguir prestando el servicio a la gente.