La candidata de Morena a la gubernatura del estado de México, Delfina Gómez Álvarez, denunció ante el Instituto Nacional Electoral (INE) a los dirigentes nacionales del PRI y del PAN, Enrique Ochoa y Ricardo Anaya, respectivamente, y al ex presidente Felipe Calderón, por considerar que han ejercido violencia política de género en su contra.

Flanqueada por legisladoras y líderes de su partido, acudió al INE a solicitar que el instituto active el protocolo para atender la violencia política contra las mujeres, a fin de que cese esta campaña de discriminación y desprestigio, como la calificó.

Los representantes de partidos promueven con sus acciones el clasismo y la misoginia, expresó mientras integrantes de Morena sostenían pancartas con algunas notas publicadas en su contra.

En su queja, señala que Calderón Hinojosa utilizó un mensaje de Twitter para reducir su persona a la figura de delfín, en un ataque de denigración, calumnia y odio.

El líder nacional del PAN se refirió a ella como títere y Ochoa Reza aseguró que el presidente nacional de Morena, Andrés Manuel López Obrador es el titiritero de la candidata.

Mientras la candidata declaraba ante medios, empleados del PAN repartieron en el INE un comunicado, donde Anaya arremetió de nuevo en su contra al señalar que como alcaldesa de Texcoco quien mandaba era Higinio Martínez (actual edil) y ella se autopagó 440 mil pesos al término de su gestión. Incluso, el líder panista, en un comunicado refirió que la denuncia de la aspirante de Morena ante el INE es una cortina de humo que pretende esconder hechos vergonzosos de su trayectoria política.

Gómez Álvarez, de gira por Tlalnepantla, reiteró que al concluir su gestión como edil de Texcoco cobró un finiquito cercano a 300 mil pesos conforme a derecho y todo está aclarado.

En su gira se reunió con colonos de Tequexquináhuac y más tarde con empresarios, a quienes les les ofreció que de ser gobernadora acabará con los moches en la contratación de obra pública en el estado de México.