Gobiernos rechazan incluirla en sus carteras de proveedores
Domingo 16 de abril de 2017, p. 22
Zimapán, Hgo.
Integrantes de la cooperativa indígena Petreo Zim SCL del ejido Benito Juárez, dedicada a la producción y transporte de grava, están a punto de ir a la quiebra, ante la negativa de los gobiernos estatal y del municipio de Zimapán de incluirlos en sus carteras de proveedores.
Hemos mandado oficios al gobernador Omar Fayad Meneses y al alcalde de Zimapán, Érick Marte Villanueva, para que nos compren grava para las obras carreteras y de caminos que tienen programadas este año, pero no nos hacen caso, a pesar de que en campaña prometieron apoyarnos
, dijo Martín Reséndiz Ramírez, presidente de la cooperativa.
Señaló que Petreo Zim SCL fue fundada en diciembre de 2016 por 19 transportistas de materiales pétreos, quienes ante los bajos salarios y nulas prestaciones que recibían de las grandes mineras que provocan gran devastación al medio ambiente, integraron la fábrica para producir grava sin hacer uso de sustancias contaminantes.
“Por falta de recursos pagamos por la trituración de la piedra. Necesitamos una gravera para destruir la roca en miles de pedazos. Vendemos a precio bajo la piedra en bruto del ejido a esta empresa dedicada a triturarla, lo cual nos deja un margen reducido de ganancia. Por viaje obtenemos 500 pesos para salarios, compra de materiales y combustible.
Si tuviéramos gravera nuestras utilidades serían mucho mayores, pero ni el gobierno estatal ni el municipal nos quieren dar trabajo, ni tampoco apoyos para comprarla. El presidente municipal presume que la demarcación es minera, pero sólo da recursos y apoyos a las grandes transnacionales dedicadas a la extracción de materiales
, agregó Martín Reséndiz.
Explicó que los 19 socios de la cooperativa junto con sus familias a diario extraen el material pétreo a mazazo limpio
de uno de los cerros que hay en el ejido de Benito Juárez, y de forma rudimentaria suben a grandes alturas del cerro, sostenidos por cuerdas para desprender las rocas que después son colocadas en las bateas de sus camiones de carga para llevarlos a la trituradora.
Quienes nos ayudan y respaldan son las autoridades del ejido de Benito Juárez, en Zimapan, quienes nos dieron permiso de explotar la piedra a cambio de que cooperemos con algún viaje de grava para la comunidad
, agregó.
Puntualizó que sostuvieron reuniones con integrantes de la refresquera Pascual Boing y la agrupación Comunidades Unidas de Zimapán para obtener asesoría en la comercialización y la obtención de recursos.