El viernes, integrantes de la familia de Javier Duarte fueron detectados por la Policía Federal (PF) en el aeropuerto de Toluca, y se les dejó pasar como si no se les hubiera identificado. El plan de vuelo hacia Guatemala y el seguimiento que se dio por agentes de ese país llevó hasta el ex gobernador de Veracruz, informaron funcionarios del gabinete de seguridad nacional.

La compañía Redwings, con sede en Querétaro, envió un avión BeechJet 400 para trasladar desde Toluca a Guatemala a los familiares de Duarte. La compañía se especializa en brindar un servicio exclusivo y lujoso en vuelos privados.

La nave fue pilotada por Juan Rivera Hinojoso y Moisés Guillermo Rivas Flores. Los pasajeros eran los tres hijos de Javier Duarte: Emilio, Carolina y Javier; su suegra, María Virginia Yazmín Tubilla de Macías; su cuñada, Mónica Ghihan Macías Tubilla; su concuño, José Armando Rodríguez Ayache, y Paula y Santiago Rodríguez Macías, familiares de Karime Macías, esposa de Javier Duarte.

La PF revisó los equipajes y detectó que Jorge Armado Rodríguez llevaba más de 10 mil dólares, que presuntamente entregaría a Javier Duarte. Fue retenido solamente para que pagara una multa por llevar 7 mil 500 dólares más de lo permitido, y luego siguió el viaje, indicaron las fuentes consultadas.

La familia del ex mandatario veracruzano abordó la nave y partió al filo de las 10 de la mañana rumbo a Guatemala.

Los Duarte alquilaron tres habitaciones en el hotel La Riviera de Atitlán, en el municipio de Panajachel, y esperaron a que el ex gobernador llegara.

A las 20 horas de Guatemala, Duarte llegó al vestíbulo del hotel, donde un grupo de 12 agentes mexicanos y guatemaltecos lo detuvo. En las habitaciones, sus familiares se quedaron esperando.