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La diva Barbra Streisand es una chica de barrio
 
Periódico La Jornada
Domingo 23 de abril de 2017, p. 5

Nueva York.

Barbra Streisand lleva vendidos más de 140 millones de discos y en sus estanterías tiene, además de dos premios Óscar, varios Grammys, Emmys y Globos de Oro. Pese a ello y a su legión de fans en todo el mundo, sigue viéndose como la chica de Brooklyn.

Tengo dos caras, dijo una vez a la reina de los talk shows, Oprah Winfrey. “No tengo problema en donar grandes sumas de dinero con fines benéficos, pero mi yo de Brooklyn aún me pregunta: ‘¿este azulejo cuesta realmente 10.95 dólares?’” El lunes cumplirá 75 años, y sigue muy activa.

Prueba son los dos discos que acaba de lanzar: uno con temas de Broadway y otro con duetos. A partir de 2020 dirigirá un nuevo centro cultural junto al World Trade Center y recientemente anunció un par de conciertos para principios de mayo; uno, en su Brooklyn natal. Con todo, los escenarios no son precisamente su pasión. Streisand sufrió durante décadas de un pánico escénico que casi le revolvía las tripas. Uno de los motivos por los que vuelvo a actuar es porque ahora hay pastillas contra el pánico escénico. Ojalá alguien me hubiera hablado de ellas hace años.

No le gustan las fotos

Tampoco en el resto de aspectos Streisand vive la vida de una estrella mundial. Evita las alfombras rojas (¿Por qué he de posar ante un cartel publicitario? No me gusta que me tomen fotos) y las entrevistas (No me gusta hablar de mí ni del trabajo).

No obstante, le gusta opinar sobre temas actuales, sobre todo a través de su sitio en Internet y de Twitter. Apoyó abiertametne a Hillary Clinton durante la campaña electoral y últimamente dispara contra Donald Trump: No puedo respetar a un racista, sexista y xenófobo que nos perjudica a todos con su comportamiento.

La carrera de Streisand comenzó en los años 60, en clubes y revistas de Broadway. Criada en una familia humilde judía-ortodoxa en el barrio de Brooklyn, desde muy temprano soñó con ser actriz. Fui a clases de interpretación desde que tenía 14 años y quería ser una actriz clásica, dijo en una ocasión al diario británico The Telegraph.