Caracas.

El gobierno de Venezuela celebró este jueves su retiro de la Organización de Estados Americanos (OEA), proceso que comenzará a partir de este viernes, en medio de una creciente presión internacional y una ola de protestas contra la administración del presidente Nicolás Maduro que deja una treintena de muertos, disturbios y saqueos.

Ante una concentración de mujeres chavistas en el Palacio de Miraflores, Maduro aseguró que su país ya es libre y no reconocerá ninguna decisión del organismo hemisférico, al que acusa de intervencionismo. “¡La OEA, pa’l carajo!”, clamó, al declararse orgulloso de haber ordenado el retiro de su país.

Tengo el orgullo de decir que como presidente, en uso de mis atribuciones exclusivas, tomé la decisión de retirar a nuestra patria de la OEA, del intervencionismo, de tanta ilegalidad y abuso, expresó el presidente, quien además insistió en acusar a sus adversarios de promover un golpe de Estado.

Sólo 24 meses hay que durar para romper todas las amarras, pero ya hoy somos libres y no reconocemos ninguna reunión, ninguna decisión de la OEA que vulnere el derecho internacional e intervenga en los asuntos de Venezuela, sostuvo.

Caracas anunció la noche del miércoles su retiro definitivo luego de que la OEA convocó a una reunión de cancilleres, para evaluar la crisis que vive este país.

Venezuela se aparta voluntariamente del organismo (Cuba fue expulsada en 1962 y readmitida en 2009, aunque La Habana se niega a regresar) al alegar intervencionismo e injerencismo de un grupo de países encabezados por Estados Unidos, para derrocar a Maduro por medio de la OEA.

Es un día de victoria para Venezuela. Sin duda alguna hoy amanecimos más libres, más independientes, hemos roto con las cadenas del monroismo, declaró a su vez la canciller Delcy Rodríguez, en referencia al ex presidente de Estados Unidos James Monroe y la doctrina de América para los americanos que acuñó.

Estaba previsto que la carta que da inicio al proceso de retiro –que durará 24 meses– se entregara este jueves al secretario general, Luis Almagro, pero fue aplazado por el gobierno hasta el viernes, informaron fuentes diplomáticas a la agencia de noticias Dpa.

Almagro ha insistido en la aplicación de la Carta Democrática –para casos de ruptura del orden constitucional– al acusar al gobierno de Maduro de convertirse en una dictadura.

Para Julio Borges, presidente de la Asamblea Nacional (Congreso, de mayoría opositora), salir de la OEA es una constatación de que el gobierno de Maduro está derrotado.

Nuevas marchas opositoras se llevaron a cabo en esta capital para protestar por la muerte de un estudiante, presuntamente por el impacto de una bomba lacrimógena en el pecho, lo que llevó a Yibram Saab, hijo del titular de la Defensoría del Pueblo, Tarek Saab, a exhortar a su padre a actuar para poner fin a la injusticia y brutal represión durante las manifestaciones.

Además, en sesión especial en el Parque Miranda, el Congreso aprobó un manifiesto en el cual pidió apoyo internacional para lograr una elección presidencial anticipada.

Respaldo cubano

Cuba apoyó la decisión de la república bolivariana al señalar que las agresiones contra Venezuela y la despreciable conducta de la OEA en su contra, confirman que dondequiera que haya un gobierno que no convenga a los intereses de los círculos de poder imperial y a sus aliados, será atacado.

En una declaración, la cancillería de la isla señaló que la postura de la OEA redita las bochornosa páginas escritas contra la revolución cubana en la década de los 70. Hemos sido testigos, una vez más, de otra decisión infame e inmoral de la desprestigiada OEA en contra de la revolución bolivariana, expresó.

Ese organismo, dijo, ha permanecido siempre de espaldas a los pueblos de América, con una historia de casi 70 años de subordinación a los intereses oligárquicos e imperialistas, y ha estado ausente cuando la región ha sufrido intervenciones y agresiones políticas, económicas y militares, o graves violaciones a la democracia y a los derechos humanos.

A su vez, la Eurocámara condenó la represión brutal durante las manifestaciones en Venezuela, medida que, a juicio de Caracas, alienta a los opositores violentos. En una resolución adoptada este jueves, los eurodiputados apremian a apoyar el proceso de mediación en el país sudamericano.