Durante la sesión de la Comisión Permanente, Morena y PT exigieron a la dirección general de Petróleos Mexicanos (Pemex) que separe del cargo a su enlace legislativo en el Congreso, Rosario Brindis Álvarez (ex diputada del PVEM).

Incurrió en abuso de poder, tráfico de influencias y actos de corrupción al operar una red que benefició a su esposo, Alberto Ríos, a quien se le adjudicó un contrato de 567 millones de pesos para proveer de alimentos y medicamentos a las plataformas de Pemex en el Golfo de México, señalaron.

Rocío Nahle, David Monreal, Miguel Barbosa y Manuel Bartlett insistieron en la urgencia de una respuesta positiva de Pemex, al documentarse la corrupción de Brindis Álvarez, quien es empleada de la petrolera e integrante de su Comité de Transparencia; operó y tuvo intervención para que su esposo, representante de compañías que dan servicios a Pemex, se llevara contratos para plataformas petroleras.

Alberto Ríos es vocero de Delta Al Muhital Shipping y Amar Offshore. Son empresas que tenían unas plataformas pequeñas en Arabia Saudita, de donde las movieron para entregarlas en contratos ventajosos por más de 500 millones de dólares. Yo creo que el director de Pemex tiene que informar de esto. Automáticamente, Brindis debe de separarse del cargo; deja de ser una persona confiable para ser interlocutora en la Cámara de Diputados y en el Senado, expuso Nalhe.

Recordó que en el escándalo de corrupción orquestado por Emilio Lozoya, ex director de Pemex, se encuentra involucrado el ex presidente Felipe Calderón Hinojosa, quien durante su administración entregó un contrato a 20 años a Marcelo Odebrecht, en forma ventajosa, para darle el suministro de gas etano a precio preferencial.

Por su parte, Manuel Bartlett Días y Miguel Barbosa coincidieron en la urgencia de que desde el gobierno se tomen decisiones que mitiguen las secuelas de corrupción que se descubrieron en el actuar de Brindis.