Estefanía Torres exige parar tratado hasta que Peña se comprometa a respetar derechos
Sábado 20 de mayo de 2017, p. 6
Madrid.
Estefanía Torres Martínez es la eurodiputada del grupo Podemos que ha llevado la voz de los activistas desaparecidos o asesinados en México hasta el Parlamento Europeo, el corazón del proyecto de la Unión Europea. Su objetivo es advertir de la espiral de violencia y falta de garantías en el respeto a los derechos humanos, para lo que exige a la Comisión Europea y a todos los países miembros que se paralicen las negociaciones con México en el tratado con la región hasta que haya un compromiso del gobierno de Enrique Peña Nieto con el respeto a los derechos humanos. Su último motivo para la indignación fue el asesinato en Culiacán de Javier Valdez, corresponsal de La Jornada en Sinaloa y cofundador de Ríodoce.
–¿Qué percepción hay en Podemos y en el Parlamento Europeo sobre la situación de la amenaza a los periodistas en México?
–Realmente la percepción es horrible porque la situación no puede ser más inquietante. No puede ser que a una persona la acosen o la asesinen porque haga su trabajo y cuente la verdad. Los periodistas cumplen una función social clave y muchísimo más en un país como México. Además, nos parece que las autoridades no están actuando como deberían por todo lo que está pasando con los periodistas y con los defensores de los derechos humanos, como las detenciones arbitrarias y no hacer caso a los dictámenes de la ONU. Eso ya pone bastante en entredicho la manera en que el gobierno de México está gestionando el conflicto que tiene con el narcotráfico, que es al final la causa de todo lo que está pasando.
–¿Qué respuesta han dado las autoridades mexicanas a sus expresiones públicas y directas de preocupación ante la violencia y las amenazas a la prensa?
–Ninguna, pero nosotros vamos a seguir ejerciendo la presión política, que creemos que es necesaria precisamente porque el pueblo mexicano no se puede sentir abandonado a su suerte por unas autoridades que lo único que hacen es mirar para otro lado. Al igual que en ocasiones hace también el Parlamento Europeo. Nosotros entendemos que, además de haber enviado la carta en nombre de varios europarlamentarios a Enrique Peña Nieto, también creemos que las autoridades europeas deben paralizar las negociaciones del acuerdo global entre la Unión Europea y México hasta que haya cambios en la política de defensa de los derechos humanos. Seguiremos sacando a la luz esta realidad y lo diremos públicamente siempre que podamos. Porque además, según los últimos informes internacionales, México es el segundo país más letal del mundo, sólo por delante está Siria. Pero México ya rebasa las cifras de Afganistán o Somalia. Así que la situación es extremadamente grave.
Vidas humanas en riesgo
–Además de la carta de los diputados europeos, ¿prevén más acciones concretas para denunciar el acoso a la prensa en México?
–Sí, también queremos llegar a acuerdos puntuales para tratar de elevar al Parlamento Europeo una pronunciación y un debate público sobre la situación en México. Nosotros tenemos que trabajar para eso porque es vital, porque lo que está en riesgo son vidas humanas y derechos que nos conciernen a todos. Vamos a seguir estudiando más vías para ejercer una presión cada vez mayor para que podamos realmente hablar del compromiso de la defensa de los derechos humanos en México y de que las autoridades tomen cartas en el asunto. Entendemos que esa es nuestra obligación y nuestro deber como representantes públicos. Porque lo que ocurre no sólo le duele al pueblo de México, le duele al mundo entero. Y es escandaloso que haya un silencio cómplice.
–Las autoridades europeas y los grupos hegemónicos miran para otro lado cuando se intenta abordar esta situación, ¿no es así?
–Sin duda. Vamos a seguir trabajando para que no lo hagan, que hay un compromiso con México y con su gente que no sólo debe ser para hacer negocios y hacer tratados de libre comercio, sino que también hay que mirar el respeto a los derechos humanos. Por eso exigimos cláusulas vinculantes en derechos humanos y aspectos ambientales.