El Estado Islámico reivindica el ataque, pero expertos dudan que sea el responsable
El agresor, un joven de 22 años nacido en Reino Unido; sus padres, refugiados libios
La primera ministra británica ordena elevar el nivel de alerta de severo
a crítico
Miércoles 24 de mayo de 2017, p. 28
Manchester.
Miles de personas participaron la noche de este martes en una vigilia en Manchester, que comenzó con un minuto de silencio para recordar a las víctimas del ataque suicida perpetrado al finalizar un concierto de la estrella pop estadunidense Ariana Grande.
El atentado, que dejó 22 muertos, niños incluidos, y 59 heridos, fue reivindicado por el Estado Islámico (EI), pero expertos dudan que el grupo extremista sea el responsable, porque no había evidencia de relación alguna entre el autor del ataque y esa organización, a la que Gran Bretaña combate en Siria e Irak junto con Estados Unidos y decenas de países aliados.
La policía identificó al atacante suicida como Salman Abedi, de 22 años, nacido en Gran Bretaña, cuyos padres son refugiados libios. Otro hombre de 23 años fue detenido.
La primera ministra, la conservadora Theresa May, ordenó elevar el nivel de alerta de severo
a crítico
, al considerar que un nuevo ataque podría ser inminente
, cuando quedan tres semanas para las elecciones generales en Reino Unido.
La premier elogió la solidaridad de la población de Manchester, que mostró su valor de cara a la cobardía de los atacantes
.
La reina Isabel II, acompañada por su esposo, el príncipe Felipe; su hijo, el príncipe Carlos, y la esposa de éste, Camila, guardaron un minuto de silencio en la escalinata del Palacio de Buckingham, mientras se entonaba el himno nacional.
El Estado Islámico afirmó que se trató de una venganza contra los cruzados
. Aseveró: Con la gracia y el apoyo de Alá, un soldado del califato logró colocar varios artefactos en medio de una reunión de cruzados en la ciudad británica de Manchester, en venganza por la religión de Alá, y con la intención de aterrorizar a los (incrédulos) y en respuestas a sus transgresiones contra las tierras de los musulmanes
.
Según la investigación policial, lo dicho por el EI no tiene nada qué ver con lo ocurrido en la arena.
La familia de Abedi vivió en el área de Fallowfield, sur de Manchester, durante al menos 10 años, según el diario Daily Telegraph. La zona fue allanada este martes por grupos policiacos.
Un vecino, Peter Jones, de 53 años, describió el área como tranquila y segura
, y expresó que estaba conmocionado
al saber que el sospechoso era de la zona.
El padre de Abedi es conocido en la comunidad y estaría residiendo en Trípoli, según fuentes consultadas por el diario The Guardian. La comunidad libia en Manchester, la más nutrida del país, cuenta con unos 16 mil miembros, según la BBC.
Tras el estallido, los asistentes al concierto de Ariana Grande corrieron despavoridos, lo que incrementó el número de lesionados. Testigos reportaron que el lugar de la explosión estaba lleno de globos rosas y orejas de gato, característicos en los conciertos de la artista, cuyo principal público son adolescentes y mujeres jóvenes.
Se suspendieron las campañas para la elección nacional del 8 de junio tras el atentado, el más letal en Gran Bretaña desde que cuatro atacantes suicidas mataron a 52 en el Metro y un autobús, en julio de 2005.
Horas de zozobra
Luego del ataque siguieron horas de angustia: padres buscaban a sus hijos, a los que habían acompañado al concierto o esperaban para recoger, y amigos que se vieron separados a causa del estallido.
Twitter y Facebook se llenaron de mensajes desconsolados en busca de los desaparecidos.
Llamé a hospitales, a hoteles. A donde decían que se habían llevado a los niños. También a la policía
, relató entre lágrimas Charlotte Campbell al programa Good Morning Britain, de la televisora ITV. La hija de 15 años de Campbell, Olivia, quien asistió al concierto con una amiga, resultó herida y recibe atención médica en un nosocomio.
No ha despertado
, dijo Campbell respecto de su hija. No podemos comunicarnos con ella
.
Entre los muertos está Saffie Rose Roussos, niña de ocho años, la víctima más joven que se sepa hasta el momento. Su madre y hermana forman parte de los 59 heridos, en lo que la premier May calificó de monstruoso ataque terrorista
.
Resulta difícil comprender la mentalidad perversa y retorcida que ve en una sala atestada de niños no una escena para atesorar, sino una oportunidad para la matanza
, subrayó.
Algunos asistentes señalaron que la seguridad no fue muy estricta antes del concierto, ya que se revisó a algunas personas y a otras no. El estallido ocurrió hacia el final del acto, cuando el público comenzó a dirigirse hacia la principal estación de tren de la ciudad.
El explosivo estaba mezclado con tornillos y esquirlas de metal, con la intención de maximizar el número de víctimas.
Todo mundo se aplastaba para salir de ahí
, comentó Charlotte Fairclough, de 14 años, quien recibió sus boletos como regalo de Navidad.
Cuando salimos hacia Victoria Station había personas en el suelo cubiertas de sangre
, narró Ryan Molloy, de 25 años. Mi compañero intentaba detener la hemorragia de una persona. Le brotaba sangre de la pierna. Fue horrible
.
La estación de tren, aledaña a la arena, estará cerrada varios días, informaron las autoridades.
Con el transporte público suspendido, varios servicios de taxis se ofrecieron a llevar gratis a casa a asistentes que se habían quedado varados, y vecinos se prestaron a alojar a gente que no pudiera llegar a casa. En Twitter se creó el hashtag #MissinginManchester para ayudar a las personas a localizar a familiares y amigos.
Hayley Lunt llevó a su hija de 10 años, Abigail, a su primer concierto. Corrimos tan rápido como pudimos para salir
, aseveró Lunt. Lo que debió ser una noche magnífica ahora es una tragedia
.
Manchester ya ha registrado ataques en el pasado, aunque no tan letales. El Ejército Republicano Irlandés detonó un artefacto en 1996, en el centro de la ciudad, dejando más de 200 personas heridas y ningún muerto.