Jerusalén.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, hizo este martes en Jerusalén un llamado a israelíes y palestinos a tomar decisiones difíciles para alcanzar la paz, sin precisar públicamente cómo piensa consolidar la iniciativa que denominó acuerdo definitivo para resolver el histórico conflicto.

Tras visitar Israel, Trump viajó a Roma para una gira relámpago de 19 horas, durante la cual será recibido por primera vez en el Vaticano por el papa Francisco, encuentro delicado por las fricciones que ambos líderes han protagonizado.

Trump, quien realiza su primera gira internacional de Estado como presidente de Estados Unidos, exhortó a palestinos e israelíes a trabajar por la paz, y les pidió que pongan de lado el dolor y los desacuerdos del pasado. En un discurso en el Museo de Israel, afirmó: Hacer la paz no será fácil. Todos sabemos eso. Ambas partes enfrentarán decisiones difíciles. Pero con determinación, compromiso y la creencia de que la paz es posible, israelíes y palestinos pueden llegar a un acuerdo.

Tras sus entrevistas, el pasado lunes con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en Jerusalén, y este martes con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmoud Abbas, en Belén (Cisjordania reocupada), Trump reiteró que está personalmente decidido a ayudar a alcanzar un acuerdo de paz entre ambas partes, y dirigió un mensaje directo al premier de Israel: Los palestinos están listos para llegar a la paz. Benjamin Netanyahu quiere la paz.

En su primera visita de Estado a Israel, Trump eludió los temas más incómodos que han frustrado los intentos de otras administraciones estadunidenses para lograr un acuerdo de paz entre israelíes y palestinos. El jefe de la Casa Blanca nunca mencionó los asentamientos judíos ilegales, condenados abiertamente por la comunidad internacional. Tampoco habló del estatus de Jerusalén como capital política israelí, ni mencionó si Estados Unidos insistirá en una solución de dos estados para pacificar la región: Israel y Palestina.

Por la tarde llegó a Roma, procedente de Tel Aviv, para reunirse con los líderes italianos y con el papa Francisco en Ciudad del Vaticano. El republicano sostendrá un encuentro este miércoles por la mañana con el presidente de Italia, Sergio Mattarella, en el Palacio del Quirinal, y se reunirá también con el primer ministro, Paolo Gentiloni, con quien se entrevistó el 20 de abril en Washington.

Posteriormente, el magnate visitará al líder de la Iglesia católica, el papa Francisco, dispuesto a escuchar y sin soluciones dogmáticas a problemas como la crisis de refugiados o el calentamiento global, informó la Casa Blanca.