Logra que los aliados acepten sumarse a la lucha contra el EI
Viernes 26 de mayo de 2017, p. 24
Bruselas.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mantuvo este jueves sus diferencias con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), a cuyos integrantes exigió incrementar sus gastos de defensa, y también salieron a flote sus discrepancias con la Unión Europea (UE), cuyo liderazgo reconoció falta de acuerdos en temas como el cambio climático, el comercio y Rusia.
En su discurso ante la cumbre de la alianza, Trump acusó a los miembros de la OTAN de gastar poco en materia de defensa y de adeudar grandes cantidades
a la alianza militar. Agregó que él y sus aliados expulsarán a los yihadistas y apremió a todas las naciones a hacer lo mismo.
De los 28 estados miembros, 23 aún no pagan lo que deberían ni gastan lo suficiente en su defensa
, se quejó Trump durante la inauguración de un memorial con restos del World Trade Center y del Muro de Berlín en la nueva sede de la OTAN.
Los jefes de Estado y de gobierno de la alianza acordaron en Gales, en 2014, que cada miembro aumentaría sus gastos de defensa en al menos 2 por ciento de su PIB en el transcurso de una década.
En 2016, únicamente Estados Unidos, Reino Unido, Polonia, Estonia y Grecia cumplieron con el objetivo.
Las primeras palabras de Trump fueron para las víctimas del ataque en Manchester, para quienes pidió un minuto de silencio, y señaló que Estados Unidos nunca dejará de combatir al terrorismo.
Todas las naciones lloran hoy aquí y están junto a usted
, dijo el presidente de Estados Unidos a la primer ministra británica, Theresa May.
Trump también se refirió a la OTAN del futuro y dijo que tiene que incluir un gran enfoque sobre terrorismo e inmigración, así como las amenazas desde Rusia y las fronteras meridionales de la alianza atlántica.
Durante su primer encuentro con Trump, en Bruselas, Emmanuel Macron, presidente de Francia, expresó su intención de cambiar muchas cosas
junto con él, como la lucha contra el terrorismo, la economía, el clima y la energía
.
Antes de la cumbre, el jefe de la Casa Blanca consiguió que los aliados aceptaran el ingreso de la OTAN en la coalición internacional que lucha contra los yihadistas en Siria e Irak.
Jens Stoltenberg, secretario general de la alianza, aseguró que el ingreso a la coalición internacional contra la milicia del Estado Islámico (EI) es más que un paso simbólico.
Antes de la cumbre, Trump, que causó malestar por su cálido apoyo a la salida de Reino Unido de la UE, se reunió con Jean-Claude Juncker y Donald Tusk, presidentes de la Comisión Europea y del Consejo Europeo, respectivamente, quienes reconocieron sus diferencias con el mandatario estadunidense en temas como el cambio climático, el comercio y Rusia.