Manchester.

Gran parte de la célula responsable del atentado en Manchester fue desmantelada, aseguró la policía británica, la cual detuvo este viernes a un nuevo sospechoso de 44 años, cuatro días después del ataque que causó 22 muertos y 59 heridos el lunes pasado.

La primera ministra de Reino Unido, Theresa May, durante la cumbre del Grupo de los Siete (G-7), en Taormina, Italia, se pronunció sobre el atentado. Manifestó que la amenaza de terrorismo por el Estado Islámico está evolucionando, pero no desapareciendo. Opinó: La lucha está pasando del campo de batalla a Internet.

La policía detectó un aumento drástico del número de crímenes de odio tras el ataque. Explicó que el 22 de mayo la cifra de mensajes de ese tipo fue de 28, índice promedio normal, pero el 24 de mayo se incrementó a 56.

En la investigación ha habido progresos inmensos, declaró el jefe de la unidad antiterrorista de la policía británica, Mark Rowley, aunque aceptó que queda todavía mucho por hacer.

Horas después la policía anunció la detención de un hombre de 44 años en la región de Rusholme, sur de Manchester, con lo que ya son nueve los arrestados en relación con ese atentado, reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico. Las autoridades creen que la bomba utilizada en el ataque fue armada por varias personas, debido a su complejidad.

Simultáneamente, la campaña electoral británica se reanudó con críticas a la primera ministra y a los conservadores por el atentado.

Reino Unido se acerca al primer fin de semana tras el ataque, con multitud de encuentros deportivos y en estado de máxima alerta terrorista. Estamos trabajando con los organizadores de los actos para asesorarlos y apoyarlos para que todo el mundo en este país pueda asistir a los cientos de encuentros programados y relajarse y disfrutar, dijo Rowley.