México está lejos de ser un participante destacado en la producción de energías sustentables y limpias. Más de 80 por ciento de la producción energética del país sigue dependiendo de los hidrocarburos, además de que prácticamente todos los combustibles que se usan son importados, lo que pone en riesgo la soberanía energética, señalaron especialistas en el último panel de los foros universitarios La UNAM y los desafíos de la nación.

Fueron 13 sesiones con diferentes temas, cuyas conclusiones y propuestas se entregarán a las instancias correspondientes, a fin de generar políticas públicas con base en discusiones académicas.

Jesús Antonio del Río Portilla, director del Instituto de Energías Renovables de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), detalló que entre éstas se encuentran la solar, la eólica, la geotérmica, la oceánica y los biocombustibles.

Informó que en México la generación de energía renovable es apenas de 14 por ciento, pese a que el país tiene gran potencial en fuentes solar, eólica y geotérmica. En el mundo la cifra llega a 21 por ciento; sobre todo crece aceleradamente la solar. Se requiere un cambio de paradigma, porque no hay una sola fuente renovable que pueda competir con el petróleo; es la mezcla de varias lo que lo logra, asentó.

Víctor Hugo Ventura Ruiz, jefe de la Unidad de Energía y Recursos Naturales de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), apuntó que el desplazamiento de hidrocarburos por combustibles renovables es un cambio lento, una transición de más de 100 años. Subrayó que es insostenible el estilo de desarrollo dominante, porque está asociado al deterioro ambiental y la inequidad.

En México, detalló el funcionario de la Cepal, aún hay 2 millones de personas sin electricidad y 20 millones más usan leña para la cocción de alimentos, lo que refleja las inequidades en el tema.

Juan Ignacio Navarrete Barbosa, director general adjunto de políticas energéticas de la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía, comentó que la reforma transformó el sector y hoy existe un nuevo marco regulatorio en el que muchas instituciones pueden participar.

La Agencia Internacional de Energía prevé que la eficiencia de los combustibles y las energías renovables contribuirán a la mitigación del cambio climático en 2050.

Señaló que deben acelerarse los procesos para sustituir los hidrocarburos por energías limpias, pues se espera que en 2030 tenga origen renovable 37.7 por ciento de la producción nacional, y en 2050 debe alcanzar 50 por ciento.

Luis Alfonso Muñozcano Álvarez, director general adjunto de Energías Renovables de la Secretaría de Energía, señaló que el próximo año el país deberá tener 25 por ciento de fuentes limpias, y para 2024 se planea que sea 35 por ciento.

Al inaugurar el foro, Rosaura Ruiz Gutiérrez, directora de la Facultad de Ciencias de la UNAM, donde se realizó el foro, afirmó que es un tema trascendental si se piensa en el equilibrio del planeta, que además está impactando en las nuevas tecnologías.