Civiles, la mayoría de las víctimas; ningún grupo ha reivindicado el estallido
Condena internacional al ataque; la inteligencia afgana acusa a una red aliada de los talibanes
Jueves 1º de junio de 2017, p. 26
Kabul.
Al menos 90 personas murieron y 400 resultaron heridas en un atentado con camión bomba perpetrado este miércoles en el barrio diplomático de esta capital, lo que marcó un sangriento comienzo del Ramadán, mes de ayuno sagrado musulmán.
La explosión fue causada por una cisterna de agua que contenía más de tonelada y media de explosivos que dejó un cráter de siete metros de profundidad
, indicó a la agencia de noticias Afp una fuente occidental en Kabul.
Según el Ministerio del Interior, la carga explosiva del camión fue accionada por un suicida hacia las 8:30 de la mañana, lo que provocó una potente onda expansiva que causó numerosos daños en los alrededores, donde se ubica la embajada de Alemania, el Ministerio de Relaciones Exteriores, y el palacio presidencial, así como las legaciones diplomáticas de Gran Bretaña, Canadá, China, Turquía e Irán.
La explosión causó pánico entre la población al romper puertas y ventanas, además de dejar decenas de muertos y coches destrozados
Las televisoras locales transmitieron imágenes que mostraban a residentes aturdidos y cubiertos de sangre que caminaban con dificultad.
El vocero del ministerio de Sanidad, Ismail Kawasi, aseguró que la mayoría de las víctimas son civiles.
El centro de medios del gobierno añadió que 90 personas murieron y 400 resultaron heridas, incluyendo mujeres y niños
, mientras funcionarios médicos advirtieron que el balance podría agravarse.
Entre las víctimas figuran un guardia afgano de la embajada de Alemania, un chofer y cinco periodistas, cuatro de la cadena BBC, y uno del canal afgano Tolo.
Hasta el cierre de esta edición ningún grupo había asumido la autoría del ataque, ni se sabe cuál era su objetivo.
La agencia de inteligencia de Afganistán acusó a la red yihadista Haqqani, aliada de los talibanes, de haber perpetrado el ataque. Pero los talibanes, que anunciaron a finales de abril el inicio de su ofensiva de primavera
, afirmaron en Twitter no estar implicados en este atentado perpetrado en Kabul, que condenaron con firmeza
.
En el pasado, los talibanes no han reivindicado los atentados en los que la cantidad de víctimas civiles resulta ser muy elevada.
La organización yihadista Estado Islámico, autora de varios atentados en Kabul en meses recientes, tampoco se pronunció.
Ashraf Ghani, presidente afgano, afirmó que se trató de un crimen de guerra
y reiteró que estos terroristas continúan matando inocentes incluso durante el mes sagrado del Ramadán
.
El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, condenó el ataque, lo mismo que la canciller alemana, Angela Merkel, quien expresó que en momentos como éste nos queda claro una vez más que el terrorismo no conoce fronteras. Se dirige a todos nosotros, ya sea en Manchester, Berlín, París, Estambul, San Petesburgo y hoy Kabul
.
El papa Francisco denunció este ataque abyecto
y expresó a los afectados sus más sentidas condolencias
.
Amnistía Internacional condenó el horrible acto de violencia deliberado
, que demuestra que el conflicto en Afganistán no disminuye, sino que se extiende peligrosamente, de una manera que debería alarmar a la comunidad internacional
.