Organizaciones ambientalistas, investigadores y legisladores mexicanos criticaron la decisión del presidente Donald Trump de retirar a Estados Unidos del Acuerdo de París sobre Cambio Climático y advirtieron los riesgos para nuestro país de sumarse a la posición de su vecino del norte.

Gustavo Ampugnani, director ejecutivo de Greenpeace, y Gustavo Alanis, director del Centro Mexicano de Derecho Ambiental, coincidieron en que con la decisión de Trump, Estados Unidos ha quedado del lado equivocado de la historia.

El Acuerdo de París está suscrito por 195 naciones; el tema toma relevancia en cuanto a la postura que asuma nuestro país en la renegociación del Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN), el cual tiene un apartado en materia ambiental.

Con su negativa a asumir compromisos serios para frenar el cambio climático Estados Unidos no sólo ha perdido liderazgo para enfrentar el calentamiento global, también ha quedado como un gobierno poco confiable.

Estados Unidos, recordó Alanis, es la segunda nación con mayor generación de gases de efecto invernadero; es responsable de 13 por ciento de las emisiones a escala global y con su negativa a apoyar las acciones voluntarias que cada nación se comprometió a realizar en el Acuerdo de París, establece un muy mal precedente.

Otros investigadores dijeron que esto perjudicará a Estados Unidos en mayor medida y, contrario a lo que se piensa, el tratado no se debilitará; por el contrario, se verá reforzado por el liderazgo que podrían ejercer en esa materia China y la Unión Europea (UE), de acuerdo con Carlos Gay García, investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera y coordinador del Programa de Investigación en Cambio Climático de la UNAM.

La Unión Europea lleva muchos años actuando de manera convencida en este contexto y en la reducción de emisiones.

El gobierno estadunidense ha doblado las manos ante las exigencias de ciertos sectores de su industria, mencionó Gay García.

Pero México tampoco ha cumplido con sus compromisos en la materia, porque aún no cuenta con un plan de objetivos específicos de energía solar en el Programa de Desarrollo Eléctrico Nacional, a pesar de tener compromisos de generación de electricidad limpia en la Ley de Transición Energética, señala un análisis del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria.

Según Alejandro Limón Portillo, investigador en energía y finanzas públicas del centro, nuestro país continúa desde 2013 aumentando la proporción de combustibles fósiles en su matriz eléctrica, a pesar de tener una de las mejores radiaciones solares del mundo.

El consumo de carbón para generar electricidad creció 113.2 por ciento de 2013 a 2016, es decir, el comportamiento va opuesto a lo pactado para combatir el cambio climático.

Diputados federales de PAN, Morena y PRD criticaron el anuncio del presidente Trump. La decisión, dijeron los legisladores mexicanos, confirma su ignorancia y demagogia, así como falta de compromiso ante la sobrevivencia del ser humano.

Paola Félix (Morena) advirtió que el mensaje del presidente de Estados Unidos es terrible porque el calentamiento global, es un tema que deben encontrase en todas las agenda políticas de gobiernos, partidos y políticos. Fue una determinación extrema y poco consciente.

Para el perredista Fernando Rubio, el desprecio de Trump a la protección del medio ambiente debe enfrentarse con la defensa de los recursos naturales, más allá de satisfacer intereses individuales y perversos de los sectores que los controlan.