Las empresas no cumplieron requisitos; se ampliarán contratos actuales: Palacios
El funcionario sale al paso de acusaciones por irregularidades en la licitación del servicio
Sábado 3 de junio de 2017, p. 29
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) adjudicó cinco de siete contratos para la prestación de servicios de seguridad privada de sus instalaciones. En dos regiones (noreste y noroeste) el concurso se declaró desierto porque las empresas tuvieron fallas en la presentación de sus propuestas, informó el director de Administración, David Palacios Hernández.
Indicó que como resultado de las condiciones de la licitación, que promovió la competencia entre los participantes, el instituto ahorrará 198 millones de pesos en los próximos tres años, es decir, casi 10 millones más de lo que había previsto inicialmente.
El funcionario ofreció ayer una conferencia con Patricio Caso Prado, quien a partir del próximo 16 de junio lo sucederá en el cargo. Palacios ha sido el centro de ataques planteados en diversos medios contra la licitación y más todavía después de que el pasado miércoles se anunció su salida del IMSS.
Ayer explicó que la decisión se tomó hace varias semanas y nada tiene que ver con la licitación ni con ningún otro motivo, sino simplemente recibió una oferta de trabajo en otra área del servicio público.
Lamentó que coincidiera con los cuestionamientos sobre este concurso. Señaló que antes no pudo irse y después habría sido igual, porque hace 15 días, por ejemplo, se inició el trabajo para la compra consolidada de medicamentos, la más grande del IMSS, y Caso Prado ya le está dando seguimiento.
Sobre los servicios de seguridad, comentó que el órgano interno de control del IMSS desechó las ocho quejas que presentaron cuatro empresas por supuestas irregularidades en el concurso y que ninguna de ellas presentó ofertas económicas. Palacios resaltó que no habrían aprobado porque carecen de los permisos federales que otorga la Secretaría de Gobernación para dar servicios de seguridad.
Este tema quedó solventado, aunque aún persisten señalamientos de legisladores sobre la transparencia del proceso. El funcionario subrayó que todo ha sido público, con apego a la legalidad, y en todas las etapas ha estado presente la Secretaría de la Función Pública y el testigo social designado por esa dependencia federal.
Respecto de las regiones 4 (noreste) y 5 (noroeste), cuyas partidas se declararon desiertas, indicó que ya está en proceso la extensión del contrato con los actuales proveedores para lo que resta del año y el IMSS organizará una nueva licitación.
Explicó que en la 4, que comprende los estados de Nuevo León, Durango, Coahuila, Tamaulipas, San Luis Potosí y las unidades médicas de alta especialidad (UMAE) de Torreón y Nuevo León, inicialmente se informó que nadie había presentado propuesta técnica y económica.
En la revisión del expediente físico y en Compranet se encontró la oferta técnica para la región noreste, pero en la parte económica se refería a la de occidente, por lo que se tuvo que desechar.
En la del noroeste (Sonora, Sinaloa, Baja California, Baja California Sur, Chihuahua y la UMAE de Sonora), en la que participó un consorcio de cuatro empresas, dos de ellas no cumplieron algunos requisitos de la licitación y de la Ley de Adquisiciones, que es la entrega de cartas compromiso individuales en la que, entre otros, manifiestan que no tienen conflictos de interés ni sanciones de inhabilitación, así como que están al corriente en el cumplimiento de obligaciones fiscales, es decir, el pago de impuestos al Servicio de Administración Tributaria y las cuotas obrero patronales al IMSS.
Debido a que el expediente carecía de estos documentos, la oferta se tuvo que desechar, a pesar de que en la parte técnica cumplían los requisitos de la convocatoria, explicó Palacios.