En riesgo, más de 2.4 millones de empleos en 15 estados del país
Lunes 5 de junio de 2017, p. 22
Zacatepec, Mor.
Desde sus cañaverales en México, campesinos molestos temen un derrumbe de sus ingresos si fallan las negociaciones en Washington para mantener el acceso al mercado estadunidense del azúcar, lo que erosionaría el apoyo al partido gobernante en momentos en que la izquierda está ganando terreno.
En Zacatepec, Morelos, Samuel Montes, cuya familia ha sembrado caña por generaciones, se pregunta qué pasará con él en caso de que el gobierno mexicano y representantes de la industria acepten nuevas restricciones para el azúcar refinada, la de mejor precio.
También piensa qué pasaría si la negociación colapsa y se imponen aranceles hasta de 80 por ciento al edulcorante mexicano, cerrando de facto el mercado estadunidense, el de mayor valor en el mundo.
Se nos puede venir un problema social fuerte, porque de la caña de azúcar dependen muchísimas familias
, afirmó Montes. El productor se refiere a 190 mil productores de caña y 2.4 millones de empleos que hay alrededor de la caña en 15 de los 32 estados del país, de acuerdo con estimaciones del gremio.
El pago de la caña está ligado al precio del azúcar en los mercados que la compran. Los envíos a Estados Unidos se sujetan a los llamados acuerdos de suspensión
de finales de 2014, que acabaron con el libre ingreso que había desde 2008 con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
Los convenios fijaron precios mínimos y un tope de 53 por ciento del cupo autorizado en cada ciclo para el azúcar refinada de al menos 99.5 por ciento de polaridad, que mide la calidad del endulzante.
Pero los refinadores en Estados Unidos quieren bajar ese porcentaje de refinada a 15 por ciento del cupo, dejando el resto para cruda, y reducir la calidad a una polaridad de 99.2 por ciento, cortando el camino para su venta directa a la industria y forzando su paso por las refinerías.
El industrial lo que quiere es llegar al consumidor final, que es el que da el mejor precio. Lo justo es que el industrial mande su azúcar y llegue al consumidor final
, aseveró Pedro Ocampo, jefe de la Unión de Cañeros de Zacatepec.
Estados Unidos consume 12 millones de toneladas de azúcar refinada y el precio promedio del endulzante crudo es de seis centavos de dólar por libra, más alto que el promedio mundial.
México exportó el ciclo pasado 1.13 millones de toneladas métricas de azúcar a Estados Unidos, de las que 418 mil fueron de refinada. Los embarques a otros mercados fueron de apenas 86 mil 67 toneladas, según datos mexicanos. En este ciclo se prevé el envío de 870 mil 689 toneladas métricas a territorio estadunidense.