Impresiones de México: la estampa y las publicaciones ilustradas en el siglo XIX
Entre los núcleos temáticos está el de estampería religiosa y el de la gran tríada Posada, Manilla y Vanegas Arroyo
La exhibición de más de mil imágenes se retira el 16 de julio
Lunes 26 de junio de 2017, p. 7
El arte editorial no se puede entender sin la gráfica, y viceversa. Se trata de disciplinas creativas que van de la mano y durante siglos han producido obras exquisitas, impresas en libros, periódicos, revistas, hojas volantes y folletos, dice Santiago Pérez García, director del Museo Nacional de la Estampa (Munae) a propósito de la exposición Impresiones de México: la estampa y las publicaciones ilustradas en el siglo XIX.
La muestra presenta un panorama general del desarrollo de las artes gráficas durante la época decimonónica en el país con más de mil imágenes, distribuidas en ocho salas y dos vestíbulos.
Con la curaduría de los coleccionistas Mercurio López Casillas y Gustavo Amézaga Heiras, se plantea un recorrido por obras que produjeron artistas de la talla de José Guadalupe Posada, José María Velasco, Manuel Manilla, Hesiquio Iriarte, Santiago Hernández, Hipólito Salazar, Julio Ruelas, Casimiro Castro y Constantino Escalante, entre otros.
Las piezas provienen de acervos tanto públicos como privados, entre ellos, del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (Iago) y la Biblioteca Clavijero de la Universidad Panamericana.
Presentamos pequeños universos en función de lo que plantea la curaduría porque, obviamente, no se pueden incluir todas las publicaciones decimonónicas, pues son muchísimas, pero las agrupamos en núcleos que permiten dar una identidad panorámica, más que el estudio específico de cada imagen
, añade Pérez Garci.
La muestra abre, explica el director en entrevista con La Jornada, con la herencia de una tradición novohispana: la estampería religiosa, tema que continuaron los grabadores e impresores del siglo XIX, donde encontramos lo mismo novenas, que alabanzas, oraciones o misales, muchos realizados con placas de grabados de siglos anteriores que fueron reditados, incluso en el siglo XX, como la representación del corazón de Jesús
.
Otro núcleo temático tiene que ver con las técnicas, desde el grabado en madera y lámina de cobre o plomo, hasta la litografía “que revoluciona por completo el desarrollo de las artes gráficas, al igual que la aparición de los primeros sistemas fotomecánicos que facilitaron los vastos tirajes. Mostramos las matrices, por ejemplo, una piedra litográfica del acervo Clavijero, un grabadito en madera de Posada, y una buena colección de clichés en distintos metales.
Del Iago viene una placa de cobre de un autor anónimo, pero que muestra perfectamente la factura del grabado de buril, es muy bueno. Lo tenemos en la muestra gracias a la generosidad del maestro Francisco Toledo.
También se dedica un espacio a la gran tríada
que formaron Posada, Manilla y Antonio Vanegas Arroyo, así como a obras que plasman la representación que se hizo de los mexicanos en el siglo XIX, cuando el país emerge como nación independiente.
La música, la danza, la literatura, el retrato, la sátira en la caricatura y la ilustración de publicaciones científicas, como tratados de zoología o revistas de divulgación de botánica, también están presentes en la muestra que busca que el espectador se dé una idea de lo maravilloso y extraordinario que fue en aquel siglo la ilustración de libros impresos de todo tipo
, dijo el curador López Casillas.
La edición de estampas y obras ilustradas, continuó, sirvió, sobre todo, “como medio para expresar el sentimiento nacionalista propio de la época, el amor hacia lo criollo y lo mexicano, el interés por el pasado indígena y para difundir los paisajes, los tipos y las costumbres locales, todo ello con el afán de representar la identidad de México como nación independiente.
Sin embargo, aquellas obras editoriales son testimonio de los avatares del siglo XIX mexicano, que se caracterizó por la inestabilidad política, la imposibilidad de los diferentes gobiernos para enfrentar los problemas del país y la bancarrota continua de la hacienda pública.
Impresiones de México: la estampa y las publicaciones ilustradas en el siglo XIX plasma también cómo un país que vivió tantas vicisitudes y contrariedades en aquel siglo dio lugar a que se creara muchísima obra editorial y gráfica, muy bien realizada. La proliferación de imprentas en aquella época fue fundamental para abrir muchas líneas de creación artística para posicionar la ilustración de ediciones en la escena artística mexicana
, concluyó el director del recinto.
La exposición estará en el Munae hasta el 16 de julio próximo. La cita es en avenida Hidalgo 39, Plaza de la Santa Veracruz, Colonia Centro. Horario: martes a domingo de 10 a 18 horas. Entrada general: 50 pesos. Domingo, entrada libre.