La Comisión Nacional Jurisdiccional del Partido de la Revolución Democrática (PRD) desechó la queja contra Alejandra Barrales por supuesta violación a los estatutos al mantenerse, al mismo tiempo, como presidenta del partido y como senadora de la República.

El argumento de la instancia perredista es que los tres quejosos, integrantes del Comité Ejecutivo Nacional, incumplieron con el procedimiento: una no estampó su firma autógrafa en el recurso interpuesto y dos más se negaron a entregar los documentos que los acreditan como militantes del partido.

Juan Manuel Ávila, integrante de la Comisión Nacional Jurisdiccional, informó en entrevista que ya notificaron al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación sobre la resolución, después de que éste les ordenó el 14 del mes en curso resolver si legalmente es posible que Barrales ostente los dos cargos.

El perredista explicó que ni siquiera entraron al fondo del asunto, porque los promoventes –Carlos Sotelo, Rey Morales y Margarita Guillaumín– no entregaron lo que se les pidió, como parte del procedimiento.

Se les dio un tiempo razonable y al no dar señales de vida, de acuerdo con el reglamento, se desechó el recurso, explicó. Manifestó que dos de los quejosos inclusive se sintieron ofendidos porque se les pidieron los documentos que los acreditan como afiliados al PRD y como integrantes del Comité Ejecutivo Nacional, al argumentar que son muy conocidos.

Aseguró que seguramente sus compañeros de partido acudirán al Tribunal Electoral para inconformarse con la resolución. Es el procedimiento, pero ha habido juicios en la Corte que se han perdido, porque al promovente se le pasó un día para cumplir con los procedimientos, indicó.