Para combatir la delincuencia en la Ciudad de México hay que empezar por abrir los datos de los hechos ilícitos que se cometen y de los grupos a los que están asociados, y junto con los ciudadanos buscar soluciones, afirmó el especialista en temas de política y seguridad, José Merino.

En el foro Seguridad, inclusión y calidad de vida, organizado por la delegación Tlalpan, el investigador consideró que el gobierno que esconde sus cifras es un gobierno que no busca resolver los problemas, sino evitar ser evaluado y asumir el costo político de la violencia.

A su vez, el representante de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc), Antonio Luigi Mazziteli, advirtió que las desigualdades aumentan la cultura de la ilegalidad y la proteción a la comisión de actos ilícitos.

Apuntó que se debe luchar contra la violencia que se genera en las familias y ofrecer oportunidades a los jóvenes, con espacios públicos dignos, actividades deportivas y culturales que, acompañadas de la prevención, cierren los espacios a los mercados delictivos.

Patricia Ramírez Kuri, del Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México, coincidió en que la desigualdad y la inseguridad están ampliamente vinculadas, por lo que se requiere abrir espacios públicos como mecanismo de inclusión social y urbana.