Osorio, de gentleman a hooligan
EU asume el reto de abatir el grito homófobo
on miras a la organización tripartita para pujar por la sede del Mundial 2026 y para pactar torneos regionales, Estados Unidos decidió aprovechar la Copa Oro –a disputarse en 14 ciudades– y se aboca a erradicar el grito homofóbico, rebasando a la Federación Mexicana de Futbol (FMF).
Luego de impulsar la investigación que significó un terremoto en la FIFA, el futbol estadunidense quiere ser congruente y exige un socio que tenga la cara limpia; también le interesa mantener vivo el gran negocio de los partidos moleros; por ello, sin titubeos, aprovecha el certamen de la Concacaf para educar
y sofocar de una vez por todas el reprobado clamor.
Tardíos y erráticos se vieron los federativos tricolores, que acumulan multas y apelaciones ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS, por sus siglas en francés), convencidos –dijo en octubre Guillermo Cantú, secretario general de la FMF– de que la connotación del grito ¡eeeh, puto!
no es discriminatoria, sino mero folclor
y sana diversión
. Esa actitud alentó su arraigo.
Luego de cuatro o cinco procedimientos interpuestos ante el TAS y otras tantas multas, la FMF dio visos de comprender su insensatez; echó reversa e inició campañas contra ese insulto lanzado a los porteros rivales; no obstante, no lo hizo con rigor y en el tibio intento cayeron tres penalizaciones más. Faltan las de junio, ante Honduras y Estados Unidos.
La federación fue advertida en la Copa Confederaciones y, ahora, en la Copa Oro se lee un mensaje previo a cada partido con un llamado a la no discriminación. Y como si dos ciclones coincidieran, se revive el caso de Stephany Mayor y Bianca Sierra, las jugadoras que salieron del Tri porque el técnico Leonardo Cuéllar descubrió que vivían un romance.
El balompié es todavía un deporte enclaustrado. Pocos hablan del tema. El galo Antoine Griezmann ha dicho: Hay muchos futbolistas gays, pero tienen miedo de decirlo
. Clarke Carlisle, ex dirigente de la Asociación de Futbolistas Profesionales de la Liga Premier, alguna vez reveló que habló con varios jugadores homosexuales, pero la mayoría rehusó hacer pública su condición, pues temían por sus vidas
. El asunto es serio.
Y por si no fuera suficiente darnos a conocer con el asunto del grito, el timonel tricolor Juan Carlos Osorio se descontroló de forma espantosa y dejó pésima imagen en Rusia. El colombiano pasó de gentleman a hooligan y se ganó a pulso la suspensión de seis partidos que le impuso la FIFA y que (¡va de nuez!) los federativos intentan apelar.
El termómetro del banquillo tricolor está al rojo vivo. Osorio no soporta las críticas ni los fracasos; basta recordar su periplo con aislamiento y viaje incluido para sobreponerse al inolvidable 7-0. ¡Mucho se temía que tras la Confederaciones decidiera ir al Tíbet! Su sentido del deber se lo impidió y viajó a Estados Unidos, pero recurrió a playeritas con mensajes confusos y mal hechos.
Decio de María lo confirmó en el timón quemante. Guste o no su estilo, Osorio llegará a Rusia 2018. Otro cuatrienio perdido, otra vez habrá que ir a una Copa del Mundo para ser mero animador y comparsa. No hay ni habrá nivel para enfrentar con éxito a los grandes, así lo evidenciaron las pasadas copas América y Confederaciones... La Copa Oro está resultando más aburrida que un partido entre Lobos BUAP y Puebla.
Lo que presumía el seleccionador en las pocas horas felices en Rusia, unión de grupo y armonía, quedó en entredicho en cuanto intentó incluir en el torneo de Concacaf a siete futbolistas que participaron en Confederaciones, y que por negativas de sus clubes o de ellos mismos al final su lista se redujo a Luis Reyes. Así que ni tan unidos ni tan solidarios.
Las aficiones de Chivas y Pumas deben alistarse para sufrir en el torneo Apertura 2017, al menos así lo dejan entrever sus endebles equipos. El Rebaño es un hospital y sus refuerzos serán niños lanzados a la guerra. Los auriazules incumplen su promesa de tener pocos foráneos y dar impulso a la cantera, pero ni así ilusionan.
Paco Jémez, técnico de Cruz Azul, debería pedir consejo a Miguel Piojo Herrera sobre cómo despresurizar a un plantel mediático; es mejor hablar de forma constante que callar para enseguida explotar. Antonio Mohamed amenaza con demandar al uruguayo Walter Gargano, quien lo acusó de pedirle dinero para ponerlo a jugar y luego se desdijo. Ya se le pasará el coraje al Turco. La buena noticia es que el persistente Guillermo Ochoa se aferra a Europa y arriba a Bélgica.