Los organizadores de la asamblea nacional del PRI (a realizarse el 12 de agosto) se comprometieron a analizar de manera abierta el método de selección de su candidato presidencial, uno de los principales puntos a definir en la reunión del mes próximo.

Fuentes del partido dijeron que hay comunicación directa y cotidiana con los grupos críticos o disidentes dentro del tricolor, cuyo principal reclamo es precisamente una elección abierta de su abanderado a la Presidencia de la República. Este asunto se resolverá, al menos formalmente, en la mesa temática relacionada con los estatutos, programada para el 4 y el 5 de agosto.

Ivonne Ortega, ex gobernadora de Yucatán, plantea, por ejemplo, la elección del aspirante presidencial con base en el voto de militantes y simpatizantes.

Otros grupos y corrientes de opinión definirán su posición, rumbo a la asamblea, en reuniones programadas para este sábado en la capital del país.

Los estatutos prevén, para la designación de los principales cargos de representación popular, tres vías: elección directa (miembros inscritos y simpatizantes), convención de delegados y comisión para la postulación de candidatos.

Sin embargo, los usos y costumbres en el tricolor han marcado históricamente la definición directa del candidato presidencial a través del dedazo; es decir, el mandatario o jefe de partido elige a quien pretende sea el sucesor.

No obstante, ahora surgen diversas voces respecto de esta circunstancia; algunos quieren límites para los simpatizantes (externos) y otros, por el contrario, ampliar esta posibilidad.

En la asamblea estatal del PRI en la Ciudad de México, por ejemplo, se plantea la necesidad de eliminar las prácticas patrimonialistas, autoritarias y excluyentes de la dirigencia del partido en el desarrollo de los procesos internos de postulación de candidatos y elección de dirigentes. El objetivo, afirma el PRI capitalino, es ponderar la militancia, capacitación y carrera en el partido.

En tanto, al cumplirse un año de su gestión como presidente nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza ofreció diálogo abierto, directo y autocrítico, pero sobre todo propuestas concretas, de cara a la asamblea nacional de agosto y el proceso electoral 2017-2018.

Dijo que su partido es invencible donde hay trabajo en unidad y en pluralidad, y pidió contribuir para que se inicie una nueva era en el PRI.

Por lo pronto, continúan las asambleas estatales; en los días previos se realizaron encuentros de sectores y organizaciones, así como de nivel municipal y local.

Según la Comisión Ejecutiva de Organización de la 22 Asamblea Nacional Ordinaria, hasta el momento se han realizado 3 mil reuniones de priístas, con la participación, en conjunto, de 380 mil personas.

Para las mesas temáticas y la magna reunión del 12 de agosto se prevé la acreditación de unos 10 mil delegados.

La mesa principal será la de estatutos y ésta pudiera realizarse en Campeche, aunque hasta ayer todavía no había información oficial acerca de las sedes de los encuentros regionales y temáticos.

Otra de las definiciones centrales se relaciona con los temas de ética partidista y postura ante la política económica.

La asamblea tendrá una visión crítica y será reflexiva, abierta y sincera, dijo ayer Guillermo Ruiz de Teresa, presidente de la Comisión de Hacienda del Consejo Político Nacional del PRI.