La dependencia atenderá a paseantes en sus 56 sedes
Miércoles 19 de julio de 2017, p. 21
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) inició un operativo de vigilancia en los principales destinos turísticos con motivo de las vacaciones de verano, que estará vigente hasta el 21 de agosto.
En total instaló 80 módulos itinerantes de atención en los 36 aeropuertos con más alta afluencia de viajeros nacionales y extranjeros, así como en 40 terminales de autobuses ubicadas en las 32 entidades.
El lunes personal de la dependencia colocó 11 sellos de suspensión en mostradores de diversas líneas de autobuses, guarda equipajes y agencias de viaje, e inmovilizó 220 piezas de joyería y 78 artículos para regalos y viaje, que no contaban con información comercial durante un recorrido que hizo en la Terminal de Autobuses del Sur, en la Ciudad de México.
Según la Profeco su personal en las 56 delegaciones, subdelegaciones y oficinas de apoyo en todo el país dará prioridad a la atención de los paseantes con acciones preventivas, de orientación y atención de quejas.
Aseguró que Rafael Ochoa Morales, encargado de despacho de la Profeco, inició recorridos y visitas de verificación en balnearios, hoteles, centros vacacionales, restaurantes, terminales de autobuses y centros de abasto para revisar que los proveedores cumplan con lo estipulado en la Ley Federal de Protección al Consumidor y las Normas Oficiales Mexicanas.
El funcionario recorrió la Terminal de Autobuses de Toluca, estado de México, donde supervisó la aplicación de descuentos a estudiantes, profesores y personas de la tercera edad, que entran en vigor a partir de este martes por el inicio de la temporada vacacional, así como el cumplimiento de promociones, la exhibición de precios en moneda nacional y que se expliquen las restricciones, si las hubiera.
También recorrió el parque temático Six Flags en Oaxtepec, Morelos, así como hoteles y restaurantes en esa entidad, donde conversó con turistas y pestadores de servicio, a quienes instó a conducirse con apego a la ley. Visitó también la Central de Abasto de Toluca, donde supervisó acciones de verificación en locales de productos básicos y colocó sellos de suspensión e inmovilización principalmente por la falta de precios a la vista y por básculas mal calibradas.