Ciudad Juárez, Chih.

Un grupo de indígenas de la comunidad de Catedral, municipio de Guadalupe y Calvo, exigió a Teléfonos de México (Telmex) la reparación de daños en los bosques de la región, donde durante más de 30 años ha talado pinos en forma clandestina para abrir brechas y caminos a fin de instalar antenas repetidoras, y ha depositado desechos tóxicos.

Decenas de habitantes, acompañados de autoridades ejidales, se dirigieron a la cabecera municipal de Guadalupe y Calvo (parte del llamado triángulo dorado del narcotráfico, que forman las zonas montañosas de Durango, Chihuahua y Sinaloa) para denunciar que el daño ocasionado a sus bosques asciende a unos 180 millones pesos. Asimismo, advirtieron que el ecosistema no se recuperará en 100 años.

La empresa, afirmaron, ha ocupado terrenos ilegalmente sin pagar derecho de suelo; mucho menos ha intentado resarcir el daño que ha ocasionado a la naturaleza ni ha otorgado algún apoyo ante la pobreza que hay en la sierra Tarahumara. Aquí hay mucha necesidad. La mayoría de los habitantes somos de escasos recursos. Hacen falta trabajos, escuelas, salud, y la empresa sólo ha venido a perjudicarnos, reiteraron.

La telefónica abrió un camino desde la carretera hasta lo alto de un cerro (aproximadamente cinco kilómetros), para lo cual arrasó con varias hectáreas de bosque, sin contar los desmontes clandestinos que realizó para abrir otros accesos al lugar donde están sus antenas, afirmaron los inconformes.

Mostraron un video en el cual se observan tirados, en un perímetro de aproximadamente 300 metros, filtros y residuos de aceite para motor de automóvil, lo que contamina el suelo y los mantos freáticos.

Según los pobladores, el daño a la flora y fauna es alarmante y han encontrado animales muertos por beber el agua contaminada de los arroyos.