Con el lema trabajar no es un delito, decenas de comerciantes ambulantes, en su mayoría mujeres, marcharon del Ángel de la Independencia, la glorieta de Insurgentes y el Eje 2 Norte al Zócalo, en demanda de que se instalen mesas de diálogo para escuchar a las familias que se autoemplean en la vía pública por falta de empleo.

La marcha, organizada a unos días de que empezaron los operativos para retirar el comercio informal del Centro Histórico, estuvo acompañada por el rapero Giovani, quien micrófono en mano criticó con una canción de su autoría el Pacto por México: ...ya que si me voy con el PAN, con el PRI, con el PRD perderé, entenderé que con su Pacto por México hundieron más a mi nación; gracias a Calderón nos quitaron la televisión y tú ni cuenta te has dado. En tanto, la lideresa Diana Sánchez Barrios pedía que el comercio en vía pública deje de ser botín político de las diferentes administraciones y criminalizado.

Solicitó al jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, devolverles los espacios que les fueron retirados el pasado viernes de las calles Apartado y República de Argentina; sin embargo, ante la falta de respuesta que tuvo la manifestación, en la que según los comerciantes participaron alrededor de 25 mil, pues no fueron recibidos por la secretaria de Gobierno, Patricia Mercado, dijo que continuarán las movilizaciones y que este es el comienzo de una lucha ante la cerrazón de las autoridades de no recibirlos y dialogar en torno a las obligaciones y derechos que tienen los 2 millones de comerciantes.

Reiteró que reconsiderarán su voto por el partido que más entienda la necesidad de los trabajadores no asalariados.

Cuando la marcha de comerciantes pasaba por la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo, ubicada en Paseo de la Reforma 42, el presidente de la misma, Humberto Lozano, ofrecía una conferencia de prensa en la que reveló que ante el aumento del ambulantaje, dicho organismo solicitó a las autoridades locales retirar a los vendedores ambulantes, pues a los comercios establecidos les han bajado sus ventas hasta 70 por ciento, sin contar con que han sufrido robos y asaltos.

Indicó que durante años los comerciantes establecidos han exigido que se liberen las calles del Centro Histórico de vendedores, lo que se logró en octubre de 2007, y a partir de entonces el ambulantaje se encontraba en niveles aceptables; sin embargo, hace meses se ha visto un aumento.