Unos 43 migrantes centroamericanos que viajaban en condiciones de hacinamiento e insalubridad en un camión de redilas sobre la carretera 180, a la altura del municipio de Poza Rica, Veracruz, fueron interceptados por policías federales.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Migración (INM), se logró la detención de dos traficantes que los trasladaban a la frontera con Estados Unidos, mientras los 31 hondureños, 10 salvadoreños, un guatemalteco y un nicaragüense fueron entregados a las autoridades migratorias para determinar su situación.

Indicó que de los 43 migrantes, 15 son menores de edad, y de éstos, tres viajaban sin compañía. Éstos serán resguardados por el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia de Veracruz hasta contactar con las autoridades consulares y coordinar su proceso de repatriación.

Añadió que ayer los centroamericanos fueron trasladados del norte de la entidad al puerto de Veracruz, donde se encuentra la delegación del INM. Ahí se les brindó atención de salud y alimentación mientras se coordina su traslado.

El 31 de julio 147 migrantes –48 menores de edad y 99 adultos– fueron abandonados en Ozumala, Veracruz, en la caja de un semirremolque, en el kilómetro 90 de la carretera federal 180 en el tramo a Naranjos. Personal del INM los rescató y los trasladó a la Ciudad de México para su deportación.