Jefe de inspección de Tijuana, con un pie fuera
os problemas para Juan Manuel Gastélum Buenrostro, presidente municipal de Tijuana, parecen no tener fin. Las presuntas irregularidades en la concesión de los servicios de recolección de basura y alumbrado público, así como en la renta de patrullas, se han convertido en temas públicos.
Otro dolor de cabeza para el alcalde panista que aspira a convertir a esta ciudad en la mejor de México
es Luis Antonio Carreiro Galaviz, director de inspección y verificación, dependencia mejor conocida como reglamentos
.
El joven político fue invitado a laborar en la administración de El Patas en una dependencia controversial, pues siempre se habla de pago de sobornos para permitir la operación de giros negros y el ambulantaje.
Transcurridos nueve meses del presente trienio, los señalamientos han sido múltiples. Ya se habla de su posible relevo debido a su deslealtad y al cambio radical de su modo de vida.
Un dato adicional: Carreiro fue despedido del gobierno del estado cuando era auxiliar de Miguel Ángel Bujanda Ruiz. El motivo fueron sus constantes faltas y quejas sobre su actuar como servidor público.
En la campaña de Francisco Vega de Lamadrid por la gubernatura de Baja California, en 2013, lo descubrieron manejando ebrio la unidad que transportaba al citado político. Su permanencia pende de un hilo.