El gobierno de México lamentó ayer la cancelación del Programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA por su siglas en inglés), anunciada por la administración de Donald Trump, y expresó su profunda preocupación por la incertidumbre que esto genera en alrededor de 800 mil jóvenes de origen mexicano.

Frente a la decisión, el presidente Enrique Peña Nieto anunció la defensa de los dreamers por la vía legal y la realización de gestiones ante los poderes de Estados Unidos, para una pronta solución permanente que brinde certidumbre a los afectados. Estamos a su lado, escribió en su cuenta de Twitter, en donde agregó que México recibirá con los brazos abiertos a estos connacionales y les ofrecerá el mayor apoyo posible para integrarse plenamente.

En las cámaras de Diputados y Senadores, legisladores de oposición reprobaron la determinación y reclamaron de la administración federal mexicana una postura firme, ante esa decisión racista y deshumanizada de Donald Trump. En el pleno del Senado todas las fuerzas políticas se comprometieron a llevar a cabo un cabildeo con sus pares estadunidenses para aprobar las iniciativas que legalizarán la permanencia de esa población.

Trabajo diplomático

Por la tarde, el embajador de México en Washington, Gerónimo Gutiérrez, se reunió con la secretaria interina de Seguridad Interna del país vecino, Elaine Duke, para fijar la posición mexicana ante la terminación del programa DACA, y recordó que sus beneficiarios son hombres y mujeres que llegaron en su infancia a esa nación y contribuyen de manera muy significativa a la economía y la sociedad en su conjunto.

Mientras, en la Secretaría de Relaciones Exteriores, el subsecretario para América del Norte, Carlos Sada, reconoció que al concluir el DACA, los dreamers se quedan en la indefensión y automáticamente entran a la categoría de indocumentados en cuanto expiren sus permisos de residencia.

Nos preocupa que empiece haber cacería de brujas, subrayó el funcionario en conferencia de prensa, en la que calificó como inquietante la situación de los jóvenes, pues debido a que dieron sus datos y los de su familia a la autoridad, son más visibles y, por tanto, su vulnerabilidad es más alta.

Para defenderlos, el embajador precisó que el gobierno federal actuará por la vía diplomática y en estricto apego a derecho, a fin de promover activamente ante los poderes Ejecutivo y Legislativo del país del norte, una pronta solución permanente a la incertidumbre jurídica que enfrentan los muchachos a partir de ahora.

Una primera acción se realizó ayer mismo, ya que se enviaron por conducto del embajador Gutiérrez, cartas a los senadores y congresistas estadunidenses, planteando el valor de los dreamers, para la sociedad del vecino del norte, exhortándolos a resolver el tema lo más rápido posible.

Hizo votos porque los representantes legislen de manera definitiva en los próximos meses, aunque reconoció que en los pasados 11 años no han llegado a acuerdos por pugnas partidistas, pese a que todos hablan bien de los dreamers y no hay quien no los pondere.

Luego de reconocer que la administración pública mexicana tiene la obligación de proteger a estos connacionales, dijo que la red consular en Estados Unidos redoblará esfuerzos para garantizar la más amplia protección a los afectados, a quienes se les dará asistencia legal integral e individualizada.

De hecho, Sada Solana informó que se ha hablado con autoridades de la Casa Blanca, para que se eviten la división de familias y no haya acciones que generen pánico.

Asimismo, ratificó que México recibirá con los brazos abiertos a los muchachos que regresen al país, quienes contarán con diversas medidas para su reintegración a la sociedad y economía nacional, como becas, la creación de una bolsa de trabajo en los consulados, un programa de crédito, acceso a educación sin trámites innecesarios y afiliación al Seguro Popular.

El subsecretario de Población, Migración y Asuntos Fronterizos de la Secretaría de Gobernación, Humberto Roque Villanueva, reconoció que es necesario reforzar el Programa Somos Mexicanos, que contiene una serie de acciones para recibir a los repatriados.