Debido a eventuales complicaciones que generan las cesáreas en partos posteriores, a que ahora se embarazan mujeres con mayores riesgos de salud, a que se gesta en los extremos de la vida reproductiva y a que por técnicas de reproducción asistida se tienen embarazos múltiples, la prematurez tardía se ha hecho más frecuente, consideró Ruth Castillo Sánchez, directora de la unidad médica de alta especialidad del hospital de ginecobstetricia del Centro Médico Nacional de Occidente del IMSS.

La pediatra neonatóloga detalló a La Jornada que los prematuros tardíos son aquellos bebés que nacen después de las 34 semanas de gestación (un bebé prematuro es aquel de menos de 37 semanas).

Desafortunadamente hay incremento en el índice de cesáreas. En el sector privado cada vez son más frecuentes las cesáreas por petición. A menos de que se haya llevado un control prenatal desde el primer trimestre, siempre va a haber un margen de error, lo que puede provocar que nazcan niños con menos de 37 semanas.

Añadió que una de las principales complicaciones de la cesárea y que puede complicar embarazos posteriores es la placenta previa, esto es la inserción anómala de la placenta.

Explicó que la placenta puede insertarse en un lugar diferente porque hay una cicatriz en ese útero, y esa placenta se puede insertar en la cicatriz y producir placenta previa lo que aumenta la posibilidad de un nacimiento prematuro.

Otra situación por la que se opta por la interrupción prematura del embarazo es por el riesgo de muerte materna.

Cada día se embarazan más mujeres con mayor riesgo, y están en su derecho, pero son personas que antes no lo pensarían, por ejemplo mujeres diabéticas. También hay un incremento de prematurez por el mayor acceso a técnicas de reproducción asistida, las cuales siempre tienen el riesgo de generar embarazos múltiples.

Asimismo, dijo que la preñez en los extremos reproductivos de la vida aumentó la posibilidad de tener bebés prematuros.

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año nacen en el mundo unos 15 millones de bebés en esta condición y más de un millón de ellos mueren debido a complicaciones.

La tasa de nacimientos prematuros oscila entre 5 y 18 por ciento de los recién nacidos.

La experta acotó que en los bebés prematuros los órganos están inmaduros y de ello se derivan las principales complicaciones. Éstas aumentan mientras menor edad gestacional tenga el bebé. Por ello los prematuros extremos (menos de 28 semanas) y los muy prematuros (de 28 a 32 semanas) pueden tener diversos problemas.

El primer reto al que se enfrenta el recién nacido prematuro es a respirar. Sus pulmones carecen de surfactante, una sustancia que evita que al respirar sus órganos colapsen.

También hay el riesgo de hemorragia intraperiventricular, una complicación neurológica. Asimismo, el corazón puede presentar disfunción y la piel del bebé por ser tan delgada origina que se pierda gran cantidad de líquido por evaporación y que se pierda el calor. Además cualquier lastimada leve podría derivar en un proceso infeccioso.