Espectáculos
Ver día anteriorDomingo 10 de septiembre de 2017Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 

A las 18 horas, la agrupación presentará su disco Guacamole, en el Salón Los Ángeles

Hoy reivindicamos la salsa, cuando todo es facilismo y repetición: Son del Rincón
Foto
La nueva producción de Son del Rincón contiene 10 temas de salsa brava y jazz latinoFoto cortesía de la agrupación
 
Periódico La Jornada
Domingo 10 de septiembre de 2017, p. a12

Dirigidos por el timbalero y etnomusicólogo Ricardo González, Son del Rincón presenta hoy en el Salón Los Ángeles su disco debut, Guacamole, trabajo con 10 temas originales de salsa brava y jazz latino con canciones intensas.

Es música para bailar y reflexionar, nos dice Lorena Moctezuma Sevilla, voz principal y autora de algunas canciones de la agrupación con quien platicamos. Es un trabajo que apuesta por ir más allá de los estándares conocidos en la música sonera, agrega.

Y sí, al escuchar este disco, en el que participan 10 músicos, uno descubre cierta aura de intelectualidad que demuestra calidad en los arreglos, efectividad en las ejecuciones y una lírica poética que eleva el discurso musical.

Temas de furor y rabia

Lorena lleva tiempo escribiendo poesía, y tal ejercicio lo ha pasado por el tamiz de la salsa. Ricardo González, el otro letrista y arreglista musical, parte de experiencias vivenciales y de su labor como etnomusicólogo para describir otros mundos. Juntos hacen la cancionística de Son del Rincón; el resto del grupo, la musicalidad.

Lo que hacemos son canciones urbanas de furor y rabia, entremezcladas con canto de amor; canciones que aluden a una retoma de conciencia acerca de lo que somos y nuestra circunstancia, afirma Lorena

“Este disco surgió de nuestro interés por lograr una reivindicación de la salsa en un momento en que todo es facilismo y repetición de ciertos patrones estéticos. El álbum se llama Guacamole porque también queremos vindicar nuestra cultura en el contexto de la música caribeña. Por ejemplo, en Tiempo, uno de los temas del álbum, rendimos homenaje a nuestra cultura prehispánica, por lo que a los instrumentos de la orquesta agregamos las sonajas de niebla, jarrones silbadores, trompetas de barro y guajes de madera, logrando un híbrido interesante. Igual, en Vengo del agua, que es una fusión entre la música folclórica mexicana y la salsa.”

Integrados al estilo combo, con una línea de saxofón, trompeta, trombón, piano y bajo, más la sección rítmica tradicional (tumbadora, timbal, bongó), los integrantes de esta agrupación cuentan con una experiencia profesional importante. Casi todos son egresados de diversas escuelas de música y tienen como meta incendiar las pistas de baile al tiempo que generar conciencia en quienes los escuchan.

Crecieron escuchando estas músicas en sus casas, en el barrio, y se ven como herederos de viejas glorias como Tito Puente, Machito, Mario Bauza o Rubén Blades. De ahí, su ejercicio musical de avanzada, con lo que desean alertar al público bailador y a todo aquel que los escuche que lo que tenemos para dar es salsa brava, sin artilugios ni concesiones, y poesía urbana.

En términos de mercado, el grupo se adapta a lo que hay, pero luchando por imponer lo suyo; algo difícil, si queremos trabajar en los lugares de baile donde la gente acude a escuchar los viejos temas o los éxitos del momento, señala Lorena.

Pero también debemos buscar nuestros cauces, nuestras zonas de influencia o abrir los propios camino, asegura.

Y han iniciado bien. Su oferta ya ha sido atendida en muchos foros de la Ciudad de México, con buena recepción y comentarios favorables. El público salsero ya los ubica como una de las agrupaciones de avanzada que promete revitalizar la escena musical bailable.

Por lo pronto, hoy se probarán ante el público sinodal del Salón Los Ángeles, cuando, en punto de las 18 horas, den a conocer su Guacamole.