La Habana.

El huracán Irma causó ayer en Cuba daños considerables en la provincia oriental de Holguín y en la céntrica Ciego de Ávila; sin embargo, no se reportaron víctimas mortales. Como parte de los planes del gobierno para volver a la isla a la normalidad, el presidente del Consejo de Defensa Nacional de Cuba, Raúl Castro, ordenó la creación de brigadas de apoyo en cada municipio para garantizar el restablecimiento del fluido eléctrico en las zonas azotadas por el meteoro.

La Habana, junto con las provincias occidentales de Mayabeque y Matanzas, se sumaron a los territorios cubanos en fase de alarma ciclónica ante la cercanía del ciclón, que redujo su intensidad hasta situarse en categoría tres en la escala Saffir-Simpson, en su ruta hacia las costas del estado de Florida, en Estados Unidos. Palmas y árboles de todo tipo, construcciones endebles, mar donde antes solía haber pavimento, todo ha quedado trastocado tras la fuerza de los vientos.

En las localidades más afectadas, el agua penetró más de 500 metros tierra adentro y se registraron olas de hasta siete metros de altura. Los fuertes vientos también causaron severos daños en algunas instalaciones del sector comunicaciones, informó la Agencia Cubana de Noticias.

Imágenes mostraron viviendas sin techo ni ventanas. Amasijos de maderas y zinc, pilas de escombros, caminos anegados e intransitables atravesados por gruesos troncos; en la zona oriental de Cuba, un testigo describió un desolador paisaje de árboles y postes eléctricos derribados, así como numerosos techos volando.

Los expertos de meteorología informaron que en La Habana, la capital del país y la ciudad más poblada de Cuba, las olas alcanzarían unos nueve metros en la noche de este sábado. La Defensa Civil en la capital reiteró su alerta para que la población de la urbe mantenga el desalojo y no salga a la calle.

Las inundaciones costeras son “tan grandes o más grandes de las que se produjeron cuando Vilma” en 2005 y que avanzó el agua por lo menos 600 metros adentro de la ciudad, dijo el coronel Luis Ángel Macareño.

Es importante que la capital sepa que las inundaciones van a durar más de 36 horas, es decir, va a haber persistencia, agregó el militar.

Medidas ágiles al paso de Irma

Desde el comienzo de la fase informativa en la zona oriental del país, las autoridades de la isla se movilizaron para garantizar la seguridad y protección de los ciudadanos y recursos económicos del territorio nacional. El Ministerio de Comunicaciones, ante las posibles inundaciones, tomó medidas para garantizar las comunicaciones y, a su vez, prevenir los daños materiales.

La Empresa de Telecomunicaciones de Cuba culminó el desmontaje de 34 antenas de las torres de comunicaciones ubicadas en las ocho provincias afectadas por el paso del huracán. Tomamos esa medida de prevención, pues estos artefactos son muy sensibles a los fuertes vientos, explicó Manuel Zayas Martínez, director de Frecuencia del Ministerio de Comunicaciones.

El desmontaje de puntos wifi en los territorios más afectados es también prioridad para este organismo. “Se están desmontando las antenas emisoras de la señal wifi en aproximadamente 100 zonas distribuidas por las provincias de la costa norte que recibirán el embate de Irma”, añadió Zayas. Este servicio fue suspendido 12 horas antes del comienzo del impacto del huracán en el territorio y será restablecido lo antes posible, luego del paso del ciclón, para que la población pueda comunicarse con los familiares que se encuentren en otros países, agregó.

La penetración del mar, los fuertes vientos y lluvias también podrían afectar la energía eléctrica; para prevenir esto la Unión Eléctrica de Cuba (UEC) dispuso 25 torres de emergencia para distribuir energía eléctrica en caso de interrupción. La entidad creó 155 brigadas, compuestas por mil 66 efectivos que se distribuirán entre las provincias más afectadas. Los contingentes están dispuestos a salir y trabajar en la solución rápida de dificultades que puedan presentarse, comentó Jorge Hernández, especialista principal de la defensa civil de la UEC.

Por su parte, el Ministerio de Salud Pública, en conjunto con el Grupo de las Industrias Biotecnológica y Farmacéuticas, preparó 67 brigadas médico-quirúrgicas para asegurar la asistencia médica en las comunidades de difícil acceso, informaron representantes de la organización. Este ministerio también reubicó 177 unidades del sistema de salud (farmacias, consultorios) hacia otras instituciones de los territorios con sólidas y seguras construcciones.