La propuesta de paquete económico para el próximo año del Ejecutivo federal tiene una visión de corto plazo y dejará de herencia un escenario complicado al nuevo gobierno, de acuerdo con un análisis del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).

El reporte del organismo difundido ayer indicó que la reforma hacendaria llegó a su límite y los recursos para política pública se han agotado. Aunque se observa que el presupuesto estimado para 2018 es mayor que el año anterior, este incremento no alcanza a compensar el cambio demográfico, ya que un porcentaje mayor del gasto ya está comprometido, esto indica que han decrecido los recursos disponibles para proveer de bienes y servicios a la población, afirmó Héctor Villarreal Páez, director general del CIEP, en conferencia de prensa.

Agregó que esos recursos tampoco alcanzarán para compensar el efecto inflacionario. En este sentido, el CIEP estimó que la previsión de inflación de un retorno a niveles de 3 por ciento el próximo año será difícil que se cumpla. Quizás, dijo el directivo, esa meta pueda alcanzarse hasta 2019.

Destacó que existe un espacio fiscal reducido que dará un margen menor para la ejecución de políticas públicas, por lo que el reto para el próximo gobierno será trabajar en un sistema fiscal sostenible y pensado en el mediano y largo plazos.