Después de una riña entre policías capitalinos y repartidores de gas que realizaban una manifestación de protesta, 18 trabajadores fueron detenidos y 15 pipas y camionetas fueron remitidas al corralón.

Ayer a mediodía, en la esquina de Insurgentes y San Antonio, los inconformes fueron interceptados cuando se dirigían al Instituto de Verificación Administrativa, en la colonia Nochebuena, para exigir que se reabra la gasera Usagas, ubicada en la delegación Gustavo A. Madero.

Sobre la avenida Insurgentes, a bordo de sus unidades, los manifestantes bloqueaban la circulación en sentido norte-sur, tanto para autos particulares como para el Metrobús, y pese a los llamados de que se replegaran para dejar libre un carril y el corredor confinado, el contingente hizo caso omiso.

Ante ello, granaderos y policías de proximidad formaron una valla con patrullas para impedir el avance de la marcha, mientras uniformados de la Subsecretaría de Control de Tránsito realizaron cortes a la circulación.

Algunos conductores de pipas y camionetas echaron encima sus unidades a los policías, por lo que tres resultaron con lesiones menores. Granaderos bajaron a los choferes de los vehículos, los detuvieron y los pusieron a disposición del Ministerio Público.