El coordinador de los senadores del PRI, Emilio Gamboa Patrón, sostuvo que desconoce el resultado de la controvertida encuesta que un día antes aplicó a los integrantes de su bancada para que definieran a quién respaldan como candidato presidencial del tricolor en 2018, de entre los cuatro prospectos más mencionados.

En entrevista telefónica con La Jornada, aceptó referirse a ese hecho que provocó inquietud e incluso rechazo en algunos de los miembros de su grupo parlamentario. Lamentó que la información se haya filtrado, aunque sostuvo que ‘‘no hubo nada malo’’ en esa encuesta en la que 49 de los 55 senadores priístas aceptaron definir a su favorito entre los secretarios de Gobernación, Hacienda, Educación y Salud, Miguel Ángel Osorio Chong, José Antonio Meade, Aurelio Nuño Mayer y José Narro, respectivamente.

Gamboa Patrón resaltó que al final del sondeo electoral, la urna en la que los senadores depositaron una boleta doble –por un lado los cuatro funcionarios mencionados y por el otro un espacio para ‘‘otros’’ priístas a quienes consideraran como posibles candidatos– fue cerrada, sellada y se hizo llegar al dirigente nacional del Revolucionario Institucional, Enrique Ochoa Reza.

Argumentó que el sondeo ‘‘no fue porque se me antojó’’, fue en virtud de que el presidente de su partido está haciendo auscultaciones y los senadores ‘‘son un factor político en sus estados’’.

El coordinador priísta detalló que la encuesta se aplicó en la reunión previa a la sesión del martes pasado; tres de los legisladores asistentes se negaron a llenar la boleta y otros dos la dejaron en blanco. ‘‘No pasa nada’’, ya que es importante conocer las diversas opiniones, dijo.

–¿En verdad no sabe quién de los cuatro presidenciables obtuvo más votos? –se le preguntó.

–Ayer todo México me buscó; creen que ya los abrí, pero no tengo la menor idea de cómo va a ser el resultado. Incluso el mío está sellado y no voy a decir a quién elegí –respondió el político yucateco.

Rechazó que el sondeo lo haya encargado el presidente Enrique Peña Nieto. ‘‘Fue el dirigente del partido’’, Ochoa Reza.

De acuerdo con versiones de legisladores, al final de la reunión previa del martes, luego de revisar la agenda del día, Gamboa Patrón ordenó sacar a asesores, personal de apoyo y cerrar por completo la reunión.

Luego mostró la urna y las boletas, lo que sorprendió a muchos y provocó un fuerte debate interno, ya que algunos señalaron que aún falta tiempo para definir al candidato del PRI a la Presidencia de la República.

El dirigente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado, Joel Ayala, se pronunció en contra de responder la encuesta. Advirtió que ‘‘de ninguna manera aceptaba’’ hacerlo, toda vez que se trastoca la lealtad ‘‘al primer priísta’’ del país.

De acuerdo con legisladores presentes, Gamboa Patrón respondió que era una instruccion ‘‘del Presidente’’, pero el dirigente de la burocracia insistió en que no se prestaría a una apreciación subjetiva de candidato alguno. La postura, recalcó, es mantener la cohesión y la unidad del grupo parlamentario en ese tema tan delicado.

Igualmente, el dirigente petrolero, Carlos Romero Deschamps, se opuso a la encuesta. Dijo que era ‘‘una vacilada’’. Ayer, en entrevista, el ex dirigente de la Confederación Nacional Campesina Gerardo Sánchez comentó que no se asombró, pero decidió ‘‘no palomear’’ a ninguno de los cuatro posibles candidatos ‘‘por respeto a los tiempos del partido’’.

La senadora regiomontana Cristina Díaz aclaró que no opinaría nada de un asunto privado de la bancada, mientras que Diva Hadamira Gastélum y Enrique Burgos –quienes no asistieron a la reunión del martes– coincidieron en señalar que fue un ejercicio que abona a la inclusión del partido y es sano, porque a nadie le hace daño conocer puntos de vista y opiniones en esta materia.

El senador Raúl Aarón Pozos Lanz comentó que ese examen sorpresivo es ‘‘normal’’, ya que la designación de quién será el abanderado priísta a la Presidencia de la República ‘‘es un tema que se platica siempre’’.